El desplome de un falso techo el pasado día 3 en una habitación del complejo hospitalario Arquitecto Marcide de Ferrol, que estaba ocupada y que ocasionó un herido leve, ha llevado a que desde la Consellería de Sanidade se tomen medidas inmediatas tanto en lo referente a la reorganziación de los pacientes como a las obras a ejecutar en hasta cinco plantas del hospital, que no se encuentran entre las que ya han sido mejoradas.
En la mañana de este martes, el conselleiro de Sanidade, el ferrolano Antonio Gómez Caamaño, mantuvo una reunión con la gerente del Área Sanitaria de Ferrol, Fernanda López Crecente; la subdirectora general de Investimentos del Sergas, Belén Suárez Massó; el director asistencial, Salvador Mariño-Ageitos; la directora de recursos Económicos, Ángela Calderón de Arriba; y la directora de Enfermería, Isabel Turnes, con el fin de analizar la situación y tomar medidas concretas.
De este modo, se anunció que ya se han iniciado los trámites para sustituir los falsos techos de hasta cinco plantas —de la tercera a la séptima— que forman lo que sería la parte antigua de las instalaciones, ya que las inferiores están renovadas. La medida no sólo afectará a las habitaciones contiguas sino a todas las de cada planta y a los demás espacios del bloque antiguo de hospitalización.
Está previsto que los trabajos comiencen "de forma inminente", anuncian desde la Consellería, con el fin de que concluyan ya a finales de verano. Gómez Caamaño explicó al término del encuentro que en la reunión se comunicaron las medidas adoptadas tras la evaluación detallada y realizada el pasado lunes 4 por los especialistas en estructuras.
El pasado domingo fue preciso llevar a cabo hasta 28 movimientos para proceder a la reubicación de los pacientes en habitaciones contiguas y en altura coincidente con aquella en la que se produjo el desplome. Asimismo, se colocaron testimonios, con el fin de observar si se produce algún movimiento estructural y adoptar, en ese caso, medidas de forma ágil.
Tras la revisión técnica llevada a cabo, todo apunta a que la edad de las instalaciones "ante presións excepcionais como o contraste térmico diario pola orientación da habitación onde se produciu o incidente, fixo que as aconraxes cederan", inciden desde la Consellería.
El conselleiro agradeció a la familia del paciente afectado su comprensión así como la de todos aquellos que tuvieron que ser reubicados y reconoció el trabajo de los profesionales para planificar los cambios y garantizar la máxima seguridad, minimizando las posibles molestias.