La regularización de gallineros aumentó un 40% en tres semanas

La regularización de gallineros aumentó un 40% en tres semanas
La inscripción de gallineros de autonconsumo continúa creciendo I JORGE MEIS

Las comarcas de Ferrol, Eume y Ortegal siguen inmersas en el proceso de inscribir los gallineros para autoconsumo en el Registro General de Explotaciones Ganaderas (REGA), una obligación que, si bien estaba en vigor desde hacía meses, se hizo más apremiante cuando se empezó a exigir el número de identificación de los corrales para poder vender aves. En las últimas tres semanas se han registrado 900 instalaciones en las comarcas de Ferrol, Eume y Ortegal, llegando así a 3.116 (frente a 2.215 que había a mediados de marzo).


El trámite, gratuito y que no supone el pago de ningún impuesto, puede hacerse a través de la sede electrónica de la Xunta o en las oficinas rurales, donde los servicios veterinarios oficiales tramitan el alta y asignan el código individual que identifica cada explotación. Se consideran de autoconsumo cuando no se comercializan ni las aves ni sus productos y se especifica un número máximo de 30 gallinas ponedoras y de 50 pollos de engorde (se permiten combinaciones siempre que no se supere una cifra total). También existen condiciones respecto a unas instalaciones mínimas en materia de higiene y bienestar.

 

 

Ránking


Los municipios de Ferrolterra con más gallineros, hasta el momento, son Narón, As Pontes y Ortigueira. Cada uno de ellos supera los 300 corrales, encabezando la lista la localidad naronesa con 342 (46 más que hace tres semanas), seguida por los ponteses (327) y los orteganos (316).


En el otro extremo se sitúan Ares, Moeche y Cariño, que son los que tienen menos gallineros, con 34 (la Xunta ha corregido el dato anterior, que le daba 55 por error, cuando contabilizaban en realidad 31), 41 y 56, respectivamente.


Las localidades con más de 200 gallineros son Monfero (254), Cedeira (221), Valdoviño (216), Pontedeume (205) y Ferrol (200). El ránking continúa con el rango del centenar, donde se ubican Fene (140), Cabanas (125), San Sadurniño (123) y A Capela (118). Con menos de cien, además de los ya citados de Ares, Moeche y Cariño, que cierran la lista, están As Somozas (96), Mañón y Neda (86), Cerdido (67) y Mugardos (63).


Lo que tienen en común los 20 concellos es que todos han incrementado el número de corrales en las últimas semanas, en ocasiones con aumentos espectaculares como el de As Pontes, que en 21 días sumó 148 más. 


Esta urgencia por hacer el registro, que llegó a saturar las oficinas rurales y a convertir los comercios de venta de piensos y animales en asesorías, se mantiene, quedando todavía corrales para autoconsumo que no han realizado la tramitación. De todos modos, las cifras ofrecen ya de dónde hay mayor actividad agropecuaria relacionada con las aves y de la importancia que tiene la cría de gallinas en el ámbito rural gallego para disponer, por ejemplo, de huevos propios.

 

 

Posición autonómica


Es precisamente esta particularidad la que lleva a la Xunta a oponerse a la obligatoriedad de este registro, que además supone, indican, una carga administrativa para los vecinos. La institución autonómica presentó alegaciones en cada uno de los trámites del proceso administrativo, hasta sumar cerca de 40. “En Galicia, atendendo ao importante volume de explotacións avícolas de autoconsumo e á súa volatilidade, este traballo de rexistro sería inxente e pouco eficaz”, indican desde la Consellería do Medio Rural.


La Xunta entiende que los únicos requisitos exigibles para estas explotaciones deberían ser los relacionados “coas condicións mínimas hixiénico-sanitarias e de benestar animal, así como as de permitir os controis oficiais e estar suxeitas ao réxime sancionador no seu caso”.


El pasado 20 de marzo volvieron a reiterarle al ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, su rechazo al registro obligatorio, un proceso “estéril e que non redunda en ningún tipo de beneficio para a poboación”, apunta a consellería. Su titular, José González, habla de “matar moscas a cañonazos” y avanzó que a finales de marzo ya había más de 52.000 gallineros registrados, dando así la medida de la importancia que tienen en la vida diaria del país.

La regularización de gallineros aumentó un 40% en tres semanas

Te puede interesar