Incorporar el nombre de una persona al callejero es garantizarle la inmortalidad. De otro modo, sus hazañas —ya sean locales o de impacto mundial— se diluirían con el paso de los años y las generaciones. Así, gracias a que un día Ferrol decidió darles una calle, nombramos con naturalidad a Aviador Piñeiro, Comerma, Espoz y Mina, Amboage o Gabriel Vázquez Seijas, por poner solamente unos ejemplos.
Ese rescate del olvido que supone bautizar una calle o una plaza ha beneficiado históricamente a los hombres, como ocurrió igualmente en el resto de parcelas, y cuando se pone el foco en las cifras, los números son abrumadores. A nivel nacional, según el estudio de la Universidad Pablo Olavide STNAMES LAB fechado este mismo 2025, el porcentaje de espacios con nombre de mujer es de un 12,92%, suponiendo una ligera subida con respecto a 2001, cuando se registraba un 9,7%.
Con todo, la representación femenina en los espacios públicos de la ciudad naval es todavía más baja. De los 469 que figuran en el registro del Instituto Nacional de Estadística (INE) entre calles, plazas, avenidas, travesías, carreteras, caminos y muelles, solamente un 4,05% del total se corresponden con un nombre propio de mujer, siendo el 28,1% en el caso de los hombres.
En concreto, de todas las nomenclaturas, son 160 las que se corresponden con personas y colectivos. De ellos, 132 son personajes masculinos (82,5%) —exalcaldes, pintores, marinos, escritores, monarcas, doctores, músicos, héroes militares, ingenieros, maestros, religiosos o santos, en su mayoría—, nueve se refieren a colectivos que podrían ser mixtos (5,63%) —familias, gremios como los navegantes o los donantes de sangre, la pareja bíblica de Adán y Eva, o la artística de María Manuela y Miguel Tranquilo— y 19 (11,8%) son los que les corresponden a ellas.
El número de mujeres nombradas en el callejero de Ferrol no camina, en cambio, al mismo ritmo que en el resto de España. En el caso ferrolano no se han incrementado en los últimos 25 años sino que se mantienen, mientras que sí se han incorporado más hombres —al menos diez desde 2018—, así que son los mismos 19 nombres los que se repiten.
Buena parte de ellos son religiosos. Por un lado, se encuentran diferentes advocaciones marianas —Angustias, Carmen, Dolores, Merced, Socorro, Pilar y Virxe da Cabeza, además de Virxe y María— y, por otro, las señas de algunas beatas: Santa Juana de Lestonnac, Magdalena, Santa Comba y Santa Mariña.
Asimismo, existe una plaza no muy conocida, entre Rubalcava y Almendra, que está dedicada al 8 de Marzo, Día de la Mujer, con lo que únicamente queda espacio para tres nombres propios: Concepción Arenal, la única ferrolana —con muelle en Caneliñas y una calle que, paradójicamente, la invisibiliza en parte al arrastrar su antiguo nombre del Hospital—, Emilia Pardo Bazán y Rosalía de Castro, las tres escritoras.
Hay que reconocer, no obstante, que hay lugares al margen de los adoquinados que hacen memoria femenina, dos de ellos de nuevo dedicados a doña Concha, con estatua en la avenida de Esteiro y placa en su casa natal del 177 de la calle Real. También se recuerda a la oceanógrafa Ángeles Alvariño, que da nombre a una de las bibliotecas del Campus Industrial y a la hemeroteca del Ateneo Ferrolán, y a la inventora Ángela Ruiz Robles, que bautiza el centro escolar de Recimil y se la recuerda igualmente en su casa de Real 120 con un letrero y en un mural en la universidad.
La concejala de Igualde e Muller, Elvira Miramontes, reconoce que las mujeres tienen los mismos “méritos y derechos”, pero los hombres “nos llevan siglos de ventaja”, confirmando que en la agenda del Concello está el incorporar nombres femeninos al callejero, en concreto a los nuevos espacios que están surgiendo, como podrían ser los del ampliado barrio de O Bertón.
Avanza además la edila que, en este sentido, tiene su Concejalía dos proyectos sobre la mesa. Uno de ellos pasa por crear un mapa accesible basado en la ruta de “Ferrol en Femenino” y otro es un ciclo de charlas mensuales y abiertas con mujeres referentes de Ferrol en lugares de memoria.
Precisamente, Rosa Millán, alma del proyecto cuando estaba coordinando la Casa da Muller, ha hecho —a petición de este periódico— una selección de cinco figuras y colectivos por los que Ferrol podría empezar a feminizar sus espacios, siendo la primera de la lista su querida doña Angelita, la maestra e inventora que pasó a la historia mundial por haber ideado el prototipo de la Enciclopedia Mecánica, considerada precursora del libro electrónico y con vías en otras ciudades, como Madrid: “Sería muy especial ponerle una calle este año porque es el 50 aniversario de su muerte y sus hijas aún viven”, explica la experta.
En segundo lugar, cita a Alvariño, la científica de Serantes con renombre internacional que descubrió 22 especies de organismos marinos y dio nombre, entre otros, a un buque oceanográfico. Incidiendo en que podría abrirse, asimismo, una “consulta pública”, Millán enumera también a la soprano Carolina Casanova Rodríguez, La Cepeda, que triunfó en Europa, y a dos colectivos: la Sociedade de Cargadoras e Descargadoras do Peirao de Ferrol “Unión Femenina” y a la “Sociedade de Augadoras y Augadores”.