Un problema demográfico resuelto


IGUAL que una rueda de prensa de Van Gaal nunca fue lo mismo que una de Arsenio, un mugido de una vaca frisona nunca fue lo mismo que el de una rubia gallega y por desgracia últimamente se oían cada vez menos mugidos con acento galego. Pero parece que la situación ha empezado a cambiar y las razas bovinas autóctonas –frieiseira, cachena, limiá, vianesa y caldela (hay más que denominaciones de origen vinícola)– en peligro de extinción han empezado a recuperarse. Resuelta la crisis demográfica de los cuernos y la leche, habría que empezar a resolver otra más seria: la humana.

Un problema demográfico resuelto

Te puede interesar