El “paso a dos” es un dúo de ballet, reservado para las principales estrellas femenina y masculina de la compañía, donde dejan ver sus mejores armas en un auténtico duelo de habilidad. Ayer, el XXVI Rally de Narón se convirtió, prácticamente desde el inicio de la jornada, en todo un “paso a dos” una batalla de voluntades y mecánicas entre los aspirantes al título del Autonómico de asfalto de 2013, Luis Vilariño –Mitsubishi Evo Lancer X– e Iván Ares –Porsche 911 GT3 Cup–, del que salieron finalmente victoriosos el lucense Vilariño y su copiloto Ramón López tras ocho agotadores y emocionantes tramos cronometrados por las carreteras de Ferrolterra.
La mañana ya dejó ver que iba a ser una jornada complicada para los pilotos, con una veintena de abandonos que se incrementarían durante la tarde, dejando a más de un tercio del pelotón fuera de la misma –incluyendo un incendio en el tramo A que afectó al vehículo de David y Juan Francisco García, de la Escudería Ferrol–. Entre las más tempranas y decisivas retiradas, la del campeón del Autonómico del pasado año, Pedro Burgo, que tuvo que abandonar la competición por una avería en su Ford Sierra, abriendo el camino al que sería el duelo de la sesión, protagonizado por los dos equipos principales de la Escudería Lalín-Deza, liderados por Vilariño y Ares.
Ambos se repartieron las victorias parciales en los tramos matinales y las diferencias entre ellos eran mínimas cuando se realizó la pausa de mediodía. Pero también ambos comenzaban a acusar lo complicado de una jornada pasada por agua y con zonas muy sucias a causa de la lluvia, tierra y hojas arrastradas. Así, Iván Ares perdió el uso de la tercera marcha en su Porsche, mientras que Luis Vilariño se quejaba de que la maquinaria de su Mitsubishi Lancer Evo X no se estaba mostrando al cien por cien. Por detrás de ellos, las terceras posiciones en los diferentes tramos se iban repartiendo, pero los más solventes en la persecución de los líderes –aunque ya a partir del tercer tramo se encontraban a más de dos minutos de diferencia– fueron, por un lado Belón y Castrodá, del Terra Chá; y por otro Silva y Matalobos, de A Pontenova, estos últimos inmersos a su vez en la lucha por el triunfo dentro del cuadro de la Top Ten Pirelli.
Cuando se retomó la competición fue el Mitsubishi de Vilariño el que parecía más entonado, sumando un nuevo triunfo en el quinto tramo y ampliando su renta sobre Ares, pero este se desquitaría casi inmediatamente, arrebatando la victoria a su compañero de club en la siguiente pasada cronometrada y devolviendo la emoción a la competición naronesa. Ninguno de los aspirantes a podium podía relajarse, como quedó demostrado en el penúltimo de los tramos de la jornada, en el que Ares y Bañobre fueron capaces de mantener la estela de sus compañeros de escudería –entraron a poco más de un segundo–, dejando la renta de Luis Vilariño y Ramón López, que sumaban una nueva victoria parcial –la cuarta de la sesión–, en poco más de siete segundos cuando llegaba el momento de la última y decisiva pasada de la sesión.
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Iván Ares se jugó el todo por el todo en el último tramo, sin preocuparse de asegurar una valiosa segunda posición de cara a la general del campeonato, y la arriesgada apuesta le sirvió para hacerse con el triunfo en el mismo. Vilariño había salido previamente, algo más conservador, intentando consolidar su ventaja y a punto estuvo de costarle el triunfo, ya que Iván Ares y Álvaro Bañobre “volaron” sobre el tramo D –que tuvo lugar en el municipio de Cerdido–, aventajando a sus rivales en cinco segundos en la meta. Esta gran última pasada no le serviría, sin embargo, para recortar el total de la ventaja adquirida por el piloto lucense, que terminaría alzándose con la victoria en la general del rally y en su clase, el A, por poco más de dos segundos.
Por detrás, con otro Mitsubishi, se colocaron Belón y Castrodá –vencieron además en su grupo, el N–, mientras que Silva y Matalobos concluyeron en la cuarta posición, imponiéndose además en la clasificación de la Top Ten Pirelli. Carracedo y Fernández fueron segundos tras Ares en el grupo X y terceros en el trofeo Pirelli al verse adelantados por González y Pintor, de la Escudería Surco. El primer equipo local en la línea de meta fue el formado por Pablo Rey y Luis Hernández –Escudería Ferrol–, terminando en la sexta posición de la general, mientras que el mejor equipo del Siroco, organizador de la prueba, fue el compuesto por David Grandal y Daniel Rey, decimoterceros. Dentro de la competición del Volante FGA, los primeros clasificados fueron Tenreiro y Golpe, del equipo Poceira Sport y en la Kumho, Vila y Doce, de Tino Racing.