La gran tradición industrial del área de Ferrolterra, con presencia de industrias tractoras de gran calado como Navantia –antiguamente Bazán y Astano– y Endesa, ha sido desde hace años uno de los factores principales que han garantizado el liderazgo de las tres comarcas a nivel de pensiones. Esta tendencia, al menos por el momento, continúa manteniéndose, tal y como refleja el último informe del Instituto Galego de Estatística, correspondiente al año 2022 y publicado esta semana.
 

Según refleja el documento, de los veinte municipios que conforman las comarcas de Ferrol, Eume y Ortegal, seis de ellos se sitúan entre los diez de Galicia con la media de pensiones más altas, mientras que ninguno está en el listado de las más bajas. Esta relación, no obstante, se basa en la media –es decir, la suma de todas las cuantías dividida por el número de perceptores– y no por la mediana –la cifra situada en la parte central de la relación de todas las pensiones–; un dato de gran importancia a tener en cuenta para evitar conclusiones equivocadas.

Listado

Así, a la cabeza del “ranking” gallego se situaría As Pontes, con un total de 2.720 pensionistas –el 27,2% del toda la población de municipio–, una cuantía media de 1.601 euros y una mediana de 1.376 –también la más alta del listado–. En la segunda posición se situaría Fene –1.399 y 1.179 euros, respectivamente–, seguida de Cervo (Lugo) –1.369 y 1.119–.
 

La ciudad naval y su entorno, por su parte, se situaría en la cuarta posición del listado, registrando un total de 15.302 pensionistas –el 23,8% de todos los habitantes del municipio–, con una  cantidad media de 1.339 euros y una mediana de 1.085. La relación comarcal, como refleja el informe, la completarían Mugardos en la sexta posición – 1.286 euros de media y 1.034 de mediana–; Ares en la séptima – 1.280 y 980 euros, respectivamente–; y Neda en la décima –1.255 y 992 euros–. Como se puede observar, salvo Ares y Mugardos, todos los municipios del área de Ferrolterra en el listado están relacionados con el sector industrial. Incluso Cervo, de la comarca de la Mariña lucense, se encontraría en esta área económica por la actividad de la antigua factoría de Alcoa.

Ciudades

En cuanto al “ránking” de las siete grandes ciudades, Ferrol volvería a liderar la lista con las cifras antes señaladas, seguida de A Coruña –quinto municipio de Galicia, con una media de 1.292 euros y una mediana de 1.053–; Vigo, octava de la Comunidad, con cuantías de 1.265 y 1.033 euros, respectivamente–; Santiago –1.242 y 974 euros–; Pontevedra 1.219 y 949 euros–; Lugo – 1.145 y 890 euros–; y finalmente Ourense –1.099 y 849 euros–.
 

Por otra parte, Narón, considerada la octava gran urbe gallega, se situaría en estos términos por delante de Lugo y Ourense, con una cuantía media de pensiones de 1.170 euros y una mediana de 932. 

Asimismo, viendo estos datos se hace evidente la gran disparidad que existe entre media y mediana tanto en estos grandes núcleos poblacionales como en el conjunto de toda Galicia – 1.064 euros frente a los 826 en la segunda magnitud–, lo que se traduce en que existe un porcentaje importante de población con pensiones muy elevadas, pero al mismo tiempo que más de la mitad no alcanza los 1.000 euros mensuales.

Brecha de género

Observando el mapa comarcal interactivo que ofrece el IGE, así como las cifras concretas para cada zona, resulta evidente la existencia de una enorme brecha de género en las cuantías percibidas por hombres y mujeres.
 

Comenzando por el área de Ferrol, la cuantía media masculina se sitúa en los 1.508 euros y la mediana en los 1.304; mientras que la femenina es de 995 y 780, respectivamente, es decir, un 34,02 y un 40,18% menos, pese a que la cifra de pensionistas es muy similar –18.595 hombres y 17.977 mujeres–.
 

Lamentablemente, las cifras de las comarcas del Eume y Ortegal no son mucho mejores a este respecto. En el primero de los casos, la media masculina está en los 1.654 euros y la mediana en los 1.455; mientras que en el segundo las cuantías son de 1.042 y 890 euros. Así, las mujeres eumesas recibirían de media una pensión un 40,33% inferior a la de los hombres; mientras que las de las orteganas estarían un 13,4% por debajo.