La ciudad de Salé, en Marruecos, fue el último destino donde actuó la asociación de 16 artistas profesionales, de disciplinas tan distintas como el equilibrismo o la música electrónica, que zarparon desde Francia en el mes de marzo para trasladar por mar el festival itinerante Velboata. Unos días antes de lo previsto desembarcaron en Ferrol los tres veleros con los que se desplaza este colectivo, que ofrecerá sus espectáculos en el jardín de la Ranita del puerto el viernes 9, sábado 10 y domingo 11, con taquilla inversa, de manera que el público realiza su contribución al terminar el evento.
Tras haber atravesado también fronteras portuguesas, la gira oceánica, que continuará hasta el mes de junio, llega a su cuarta escala en Curuxeiras para ofrecer esta propuesta pensada tanto para familias como para fiesteros. Durante las tres jornadas del evento, el público podrá disfrutar de conciertos de música balcánica y electrónica, espectáculos de circo y de videoproyección, además de alguna sorpresa motivada por la intención de colaborar con artistas locales. Asimismo, los niños y niñas tendrán un espacio reservado para realizar talleres, como los inicialmente previstos para las tardes del sábado y domingo, de temática circense.
El término “velboata” significa velero en esperanto, una lengua nacida como código universal, lo que constituye un nombre ideal para la asociación artística francesa y el festival homónimo que esta organiza. Aunque la mayor parte de sus integrantes proceden del país vecino, también cuentan con un miembro de Suiza y otro de Marruecos. En este último territorio ofrecieron una de sus exhibiciones más excepcionales, gracias a la colaboración con una escuela de circo local, con quien realizaron un espectáculo conjunto. Para aquellos que sientan curiosidad por adelantarse a lo que está por venir, pueden ir haciéndose una idea con el registro que van realizando en su cuenta de Instagram @velboata_.
“Para nosotros, hacer una gira en velero es mucho más ecológico que hacerla en camionetas o aviones, porque solo andamos con el viento”, destaca el coordinador de la escala en Ferrol, Florent Geffroy Rescan, que también es uno de los artistas del festival. En este caso particular, se le podrá encontrar tanto a manos del contrabajo en el concierto inaugural de música balcánica en directo y en la sesión de electropop con canción francesa.
Según apunta este responsable, el inconveniente del transporte quizás sea la dificultad de planificar el tiempo entre paradas, ya que dependen de las condiciones meteorológicas. No obstante, esta vez la suerte estuvo de su lado, habiendo llegado el sábado a tierras ferrolanas, tres días antes de lo que pensaban. Por lo demás, el coordinador solo señala ventajas, como los fuertes vínculos que van forjando con cada milla recorrida, que nutren todavía más una iniciativa tan particular como esta, propuesta por artistas procedentes de universos totalmente distintos.
El proyecto de Velboata puede resultar familiar para el público local, que quizás recuerde su visita a Ferrol en 2018. Algunos de los artistas que actuaron por aquel entonces repiten, como los profesionales del equilibrismo, el monociclo y la fotografía antigua. En esta edición, estos protagonistas volverán a desempeñar la misma disciplina, que es su especialidad, aunque enmarcada en un festival con funciones completamente distintas. Uno de los ejemplos más llamativos que adelantó Florent Geffroy Rescan podría ser una performance en la que, utilizando un pórtico de circo, se podrá observar un piano volante.
El artista quiso especificar su agradecimiento por la colaboración de las entidades e instituciones que posibilitan llevar a cabo este evento en el muelle de Curuxeiras y que además ofrecieron su ayuda con la cesión de instalaciones. De la misma manera, el coordinador se dirige al público ferrolano para animarlo a descubrir la propuesta de Velboata, protagonizada por profesionales consolidados en Francia, y recuerda que “necesitamos gente porque sin público no hay espectáculo”.