Que la mañana de ayer fue un día especial, lo aseguró sin temblarle la voz el Director General y Deportivo del Racing de Ferrol, Carlos Mouriz. Eso sí, “no sé si es positivo o negativo”, matizó el dirigente de la casa verde. A su derecha, el capitán, un “Sir” Álex López que precisamente ha querido hacerse a un lado, dejar su gran espacio para la llegada de los refuerzos necesarios para que “su” Racing cumpla el objetivo: continuar en Segunda.
“Una de las primeras personas con las que hablé cuando llegué aquí hace siete años fue con él, en una situación complicada en Tercera División para que viniera a formar parte. Nunca hubo un problema”, recuerda Mouriz, “y le sobraban sitios donde estar, contratos mejores que el del Racing para disfrutarlo y llevárselo, que merecido y ganado se lo tiene. Sólo dijo que venía al proyecto, sin duda de ningún tipo”.
Y el capitán quiso estar aquí, en casa. Una prueba, esta y las que, innecesariamente, ha mostrado a lo largo de su larga y exitosa trayectoria de que “la sangre será roja, pero sin ninguna duda la suya es verde”.
Y es que su implicación, si bien evidente en el campo, tanto jugando en la banda o en banquillo, con la disciplina racinguista era, es y seguirá siendo, toda la posible. “En los mejores y peores momentos siempre ha sido un referente, para tirar de todos los demás, entre los cuales me incluyo yo”, apuntó Mouriz en una sala de prensa como nunca antes abarrotada, en esta ocasión no sólo de medios de comunicación, sino de todos sus compañeros, cuerpo técnico y trabajadores de la entidad.
“Es con el primero con el que te encuentras cuando llegas a A Malata y ya empieza a protestar por todo, a quejarse por todo, a sumar por todo, pues ya te pone las pilas”, bromeaba el dirigente, “y a partir de ahí todas las cosas que no le hayan podido salir, no es porque no las quiera o intentado. Y eso te lo traslada siempre. No sólo con lo que veis en el campo, lo traslada con el día a día, cuando viene por la mañana y sube arriba y te cuenta todo lo que se le ocurre y las cosas que hay que hacer. No deja nada el azar. Te suma para todo”.
Álex López es, y aquí Mouriz hizo referencia a la psiquiatra Marián Rojas, “esa persona vitamina”, que apoyan, inspira, anima, transmite confianza y saca lo mejor de nosotros mismos. No sorprenden las buenas palabras para el futbolista ferrolano, que ya demostró su compromiso con club y proyecto cuando él mismo acudió a Mouriz para solicitar una bajada de sueldo “porque está la cosa jorobada”, cuenta el director deportivo sobre esa conversación. “No te preocupes que yo hago de lo que haga falta, de utillero, llevar la camiseta.... Lo tienes para todo”, recuerda el lucense, enlazando con la complicada situación por la que atraviesa la formación racinguista.
“Sabiendo que no tenemos filial y fichas ocupadas, y hay que tomar decisiones, con tiempo suficiente vino y me dijo ‘Carlos, algo que hay que hacer, mi ficha está en tus manos, haz lo que tengas que hacer. El Racing es lo primero, procura acertar”, cuenta Mouriz, confesando haber vivido esta situación por primera vez en su larga trayectoria.
Y así se gestó la despedida de Álex López, no en el campo, pero sí en A Malata. “Para nada es la salida idílica que todos deseamos que tenga un referente para el equipo, para la ciudad”, señala, “sería mucho mejor manteniendo la categoría, haciendo una fiesta el último día y dándonos un abrazo en el campo, que lo haremos”.
Creyendo ambos en su decisión, la trayectoria del ferrolano seguirá indiscutiblemente unida a la del Racing -todavía sin desvelar en qué tareas–, ya que como bien indica “no contemplo recorrer un camino hacia delante en el Racing de Ferrol sin tener a Álex a mi lado o llevando él la nave”.
Sobraban y al mismo tiempo faltaban palabras para decir adiós –en el campo– a un señor del balón como Álex López, y que el propio Mouriz sentenció con un “creo que una llega: gracias. Por lo que nos has dado, lo que ha supuesto para todos y ponte las pilas por lo que seguimos esperando de ti. Para mi es un orgullo poder estar al lado de personas como él”. Y para todo el racinguismo. ¡Muchas gracias y buena suerte, Álex López!