Pedalada a pedalada, salto a salto y curva a curva, el naronés Marco Veiga Amado –1994– ha conseguido alcanzar por fin la cima de una montaña que comenzó a escalar hace cuatro años, cuando se inició en la modalidad de enduro y en una ascensión en la que sus tres subcampeonatos nacionales ya hacían presagiar que el título absoluto estaba cerca, muy cerca.
Concretamente en Sant Hilari Sacalm, en Girona, en un trazado desconocido para el local pero que después de mucho trabajo y una dura y reciente lesión le ha proporcionado a Veiga su primer oro estatal. Un celebrado galardón que se une a los logrados en la Copa de España de esta misma modalidad y que, además, podría volver a sumar a finales de este mes precisamente en casa, en Mugardos.
¿Cómo fue esa carrera en la que por fin ha conseguido ese ansiado título?
Fue una prueba bastante dura, con un recorrido muy exigente. La verdad es que llegaba con muy buenas sensaciones, porque estoy teniendo una temporada muy buena a nivel de resultados en todas las carreras y esta del Nacional siempre la tienes señalada en el calendario. Fue bastante exigente porque la meteorología fue muy cambiante, con tormentas, y cuando llueve se ponen los circuitos mucho más difíciles, se rompen más, con el paso de los corredores se deterioran y dificultan más el pilotaje. Yo me adapté muy bien y fui constante y rápido en las especiales, pude ganar una y quedar entre los tres primeros en las otras. Al final gané con ocho segundos de ventaja al segundo –Edgar Carballo–, que llegamos hasta el último tramo muy igualados. Por suerte me salió superbien y estoy muy contento con este título, porque es muy importante a nivel de reconocimiento, sponsors, y conseguirlo era mi objetivo.
Se ha quitado una espina grande tras varios años quedando segundo
Al final son tres años que estuve muy cerca de conseguirlo. Sabía que me iba a tocar a mí, tarde o temprano. Pero va pasando de año a año, porque sólo es una oportunidad, te lo juegas a un día y hay un montón de circunstancias que afectan. En este caso di el máximo y esta vez pude conseguir el título y decir que soy campeón por lo menos hasta el año que viene.
Tras la lesión, cuando gané la carrera de la Copa de España de Cuenca la cabeza me hizo un click. Por lo menos sabía que podía competir en el Nacional, ya no tenía esa barrera psicológica
¿Qué ha cambiado de otras temporadas a esta para poder “cazar” el título?
Cada año fui dando pasos adelante. Yo sabía que técnicamente encima de la bici destaco por encima del resto. Pero el saber leer las carreras, el acondicionamiento físico que hace falta, saber correr y a nivel mental es muy exigente también porque las carreras son largas, tienes que dar el máximo en unos minutos y es difícil gestionar a veces esto. Pero no es que cambiase nada radical en estos años. Simplemente sabía que podía hacerlo, que tenía el potencial. Lo que pasa es que es verdaderamente complicado ser el campeón, porque hay varios corredores con muchísimo nivel que estamos corriendo en el Mundial, que vamos muy rápido y hay un abanico en el que cualquiera puede ganar. Sí que en este caso estaba más entre dos, Edgar y yo, luego ya hay un salto d de unos 30 segundos, pero nunca sabes. Al final la gente que es de cerca del sitio también tiene más ventaja, conoce mejor los circuitos. Tú vas allí, tienes un fin de semana para entrenarlo y siempre vas un paso por detrás. Tienes que contar con eso.
Y además lo ha hecho tras una dura lesión sufrida en la Copa de España en Burela ¿cómo han sido estas semanas?
Tuve una caída muy fuerte y estuve bastante resentido, un golpe fuerte en la zona costal, y llegaba con algunas dudas y limitaciones, tomando medicación. Pero di todo lo que tenía y estoy muy contento. Hasta la carrera de Cuenca, que fue la anterior al Nacional, llevaba dos semanas sin poder entrenar, no podía subir a la bici... Trabajando con fisio, ejercicios de respiración, etc., Y pude hacer la prueba y me hizo un click la cabeza, por lo menos sabía que podía competir en el Nacional, que es la prueba más importante del año. Mentalmente sabía que podía, ya no tenía esa barrera psicológica.
¿Sintió más alegría o liberación ante un triunfo que tiene que ser tan gratificante?
Aún lo estoy asimilando. Los grandes triunfos dicen que tardas un poco en asimilarlos. Darte cuenta de lo qué es y creo que todavía no sé lo importante que es para un deportista. Es muy grande. Para mí es muy importante y estoy contento por lograrlo. Espero disfrutarlo y sé que podré defenderlo el año que viene y ahora sé que puedo hacerlo. Llevar la manga de campeón es un chute de fuerza, de saber que estás representando a mucha gente del deporte y saber que tú eres referente, potenciarlo y mostrar que España somos buenos
¿Y en su entorno cómo recibieron este primer título?
Muy contentos la verdad. Siempre viajo con mi novia –Noe– y es mi principal ayuda, en todas las gestiones, en todo lo que puede, es un gran apoyo moral. Ella es la que siempre está ahí y mi hermano –Sergio– lo está haciendo muy bien ahora en pump truck. Estaban emocionados todos. El trabajo es un poco de todos. No es algo fácil de conseguir, te tienes que volcar mucho en ello y no sabes si te va a llegar el. Es como echar la lotería, porque todo el mundo da el máximo, pero luego hay condicionantes que no dependen de ti. Ya pueden decir que tienen un hijo campeón de España.
Aún estoy asimilando lo que he hecho. Es muy grande. Para mí es muy importante, era mi objetivo y estoy muy contento por lograrlo
Ahora a por otra Copa...
Este fin de semana tengo una prueba muy mediática en Segovia la Red Bull Holly Bike y es un formato distinto. Intentaré hacer un buen papel como siempre. Y luego espero poder ganar la Copa en casa, en Mugardos. Espero que vaya todo bien porque los dos últimos años siempre he tenido problemas. El pasado por el clima me tocó mal a mí no fui capaz de ganar y el anterior tuve problemas mecánicos. Nunca gané. A ver si este año tengo suerte y va bien todo, intentaré cerrar ahí la Copa y llevarme también ese título. También iré a alguna cita del Campeonato del Mundo y al Mundial, que entiendo que iré seleccionado a Suiza. Aún me quedan bastantes meses competitivos, pero de momento el principal objetivo está logrado. Ya es algo que mentalmente me he liberado, me vendrá bien para el resto de temporada.