¿Se imaginan una broma entre compañeros que termina en Singapur? No se trata de la premisa del guion de ninguna película de Hollywood, sino de, a grandes rasgos, el camino que ha llevado a la integrante del Natación Ferrol Blanca Hermida a ser una de las participantes en el Campeonato del Mundo de natación máster, que para esta pediatra de profesión comienza mañana en la ciudad del sudeste asiático.
Las conversaciones con su técnico Álvaro Fraga durante sus entrenamientos diarios fueron la chispa que prendió en Hermida una posibilidad que se ha convertido en realidad y que, pocas horas antes de su debut internacional, dejan a esta deportista del Natación Ferrol –previamente en el Marina a cargo de Silvano González, Ito, “mi gran apoyo cuando empecé en máster”, señala– “ilusionada y feliz. Son las dos palabras que mejor definen como me encuentro ahora, al ver que he llegado hasta aquí”, cuenta Hermida desde Singapur.
Fue el mensaje que le envió a su familia, a sus tres hijos, siendo ya consciente de dónde estaba. “Cuando conseguí la mínima, cuando decidí venir, no me lo creía, lo decía con la boca pequeña”, relata esta deportista, vinculada, desde que era pequeña, a esta disciplina, que volvió a retomar tras regresar de Bilbao. “Al llegar aquí casi se me saltaban las lágrimas, porque ves la magnitud de todo, como está todo preparado, el recibimiento... Es sobrecogedor”, señala Hermida, que en sus primeras horas ya pudo visitar una piscina en la que ella misma entrará en liza en breve. “Lo veía desde las gradas y pensaba es que yo voy a estar ahí abajo en nada”, cuenta.
“Álvaro fue el que me metió el gusanillo para venir. Si hay que ir al Mundial, se va, creo que lo puedes hacer, me decía.Y aunque ahora no esté me acuerdo de él. Él es el culpable de que yo esté aquí”, recuerda. Uno de los culpables, porque los otros son las grandes marcas firmadas por Hermida durante toda la temporada, rompiendo más de una veintena de records gallegos +40 esta campaña, en la que asimismo señala que ha estado muy arropada por sus compañeros.
“Siempre me están apoyando y recordándome lo que valgo”, destacando a su grupo de entrenamiento, el absoluto, con el que comparte horas y en el que “cayó” al ir a llevar a su sobrino a entrenar. “Creo que se me contagia un poco esa energía adolescente, juvenil y por eso el poder llegar aquí”, cuenta entre risas Hermida.
La natación se ha convertido para esta profesional de la medicina en su tabla de salvación. “Me tiro al agua y es otro mundo” relata. Y ahora tendrá la oportunidad de hacerlo en una cita mundial. Una prueba en la que, si bien antes de acudir baraja cifras de estar entre las 15 o 20 primeras, tras salir a la luz los listados de participación, la parte más competitiva y de “mirar siempre hacia adelante y querer mejorar”, hacen que inscribir su nombre en el “top 5” en Singapur vaya tomando forma.
Si bien, además de la lógica y merecida satisfacción de lograr unos resultados “a parte de eso, la experiencia de estar aquí, de ver otra gente, de ir por la calle con la acreditación y que te pregunten por la competición... Te hace sentir un poco orgullosa. Y también poder contar que una chica o mujer, no sé como llamarme, de 43 años con tres hijos ha ido a un Mundial y ha quedado entre las primeras”, señala Blanca ha decidido ponerse la primera en su lista.
Ahora le toca a ella, como apunta, y su primer premio en este camino personal y deportivo será mañana en los 400 estilos, con los 100 y 200 mariposa previstos para el lunes y martes, cerrando este regalo el miércoles en 400 libres, pudiendo seguirla a través de Teledeporte y RTVE Play. Unos canales en los que ver cómo Hermida aprovecha al máximo su turno.