No encajar gol. Ese es el objetivo del Racing de Ferrol para el tercer partido de liga en Primera RFEF ante el Valladolid Promesas, el segundo filial al que se mide el equipo de Cristóbal Parralo, en este caso en el estadio de A Malata.
El balance de los dos primeros encuentros es, a nivel de generación de ocasiones de gol, favorable al conjunto verde, que chutó más a portería que Unionistas y Bilbao Athletic, aunque sin la efectividad necesaria para conseguir los tres puntos.
Ese diagnóstico es compartido por la plantilla del cuadro ferrolano. Ayer, el delantero David Rodríguez lamentó que la escasez de acierto de cara a la portería rival “nos está penalizando”, pero aseguró que la plantilla trabaja para darle la vuelta. “Ocasiones hemos tenido, a lo mejor no con la claridad del final de la temporada pasada, pero esa situación cambiará”, explicó. “Los nuevos se han adaptado muy rápido, pero ese proceso requiere tiempo y según vayan pasando las jornadas vamos a ver un Racing mucho más ofensivo, con más llegadas, y los delanteros nos beneficiaremos de ello”.
Ese punto de vista lo secunda el lateral Alfonso Candelas. Considera que el grupo está “en línea ascendente”, pero añade que en una competición de este nivel, tan igualada, los choques se deciden “por detalles”. “Se trata”, afirmó, “de corregir errores para minimizar los daños y, sobre todo, crecer desde mantener la portería a cero”. El defensa manchego señaló que “tenemos mordiente arriba” y cree que “los goles van a llegar”.
Rodríguez y Candelas coinciden en señalar la evolución del cuadro verde en el segundo partido en Bilbao. “Jugamos mejor y llegamos más al área”, explicó el punta, que pide tiempo para que el aficionado “reconozca” al equipo del final de la temporada pasada: “Pronto se verá el conjunto que el ‘mister’ y nosotros queremos ser, con presión alta, un juego vistoso... Ese es el camino”.
En esa línea, los jugadores del Racing subrayan la importancia de hacerse fuertes en casa y el sábado, ante el Valladolid Promesas, es una buena oportunidad. A ese objetivo deberá contribuir decisivamente el hecho de contar con el apoyo de la afición, que podrá acceder al estadio sin necesidad de ser abonados. “En casa hay que ganar siempre”, aseveró el delantero, quien destaca que son ellos, los jugadores, los que “tenemos que enganchar a la afición, y eso se consigue ganando y siendo el equipo vistoso del año pasado. Con esa finalidad trabajamos”.
El equipo ferrolano está seguro de que los resultados llegarán porque en ese proceso de crecimiento colectivo hay un factor “fundamental”: la unión del vestuario, tanto los que juegan los 90 minutos como los que lo ven desde el banquillo. A ese respecto, el lateral Candelas recuerda que “en todas las posiciones hay competencia, y eso es bueno para mejorar el nivel del grupo”. En el caso de los que hasta el momento están teniendo menos oportunidades, el lateral de Ciudad Real remite a las palabras de Parralo. “Siempre nos dice que todos vamos a tener nuestras oportunidades” en una liga tan larga, “así que nuestro objetivo es, por lo tanto, estar preparados física y mentalmente para ese momento”.