El próximo jueves concluye el plazo de presentación de ofertas para el concurso de control poblacional de gaviotas que, como en los últimos años, incluye, además, a palomas y estorninos en el término municipal.
Desplazar a las gaviotas fuera de la zona urbana de modo que regresen a los espacios naturales a los que pertenecen originalmente es uno de los objetivos de este servicio que se repite cada año y que quiere que las aves decidan no anidar en tejados del centro urbano.
Pero además de esto, la empresa adjudicataria procederá a la realización de un censo en el que quede constancia del tamaño poblacional de las gaviotas que anidan en el centro, la distribución geográfica de esas nidificaciones y la identificación de las posibles causas.
El control de los nidos y las puestas de huevos hasta el mes de agosto en las cubiertas con acceso adecuado de las que se dé cuenta, porque ocasionan molestias, por parte de los propietarios o inquilinos de los inmuebles afectados es también parte del trabajo de la empresa de control poblacional de gaviotas.
Molestias de las palomas
En el caso de las palomas también se busca reducir la población nidificante.Para esto, se proporcionará asistencia técnica a todos los propietarios que denuncien molestias en las cubiertas de los edificios o en otros enclaves y se emitirán informes sobre las molestias que ocasionan y las soluciones que se plantean. También se retirarán ejemplares atrapados. Las labores se llevarán a cabo durante todo el año.
En ellos, se procederá a la retirada de nidos, huevos y crías de las aves, así como de ejemplares de cualquier edad que puedan estar atrapados en lugares públicos o zonas como patios interiores de las viviendas.
Aunque entre abril y agosto es la época de trabajo en campo, la adjudicataria llevará a cabo labores de asistencia técnica a lo largo de todo el año, en un contrato de dos años de duración por un importe de algo más de 152.000 euros el bienio, prorrogable.
Para contactar con la empresa, la ciudadanía tendrá que ser quien llame por teléfono o contacte por correo electrónico en los destinos facilitados por la concejalía de Medio Ambiente y, una vez concertada la visita, el personal –dos operarios con formación suficiente–, no tardará más de tres días en acudir.
Además de las gaviotas, la empresa controlará las concentraciones de estorninos para que no ocasionen molestias en zonas verdes y parques públicos. En este caso, se vigilan entre octubre y marzo las zonas donde duermen, para trabajar en el desplazamiento a otros espacios. Se elaborará también un censo y se hará un seguimiento mensual durante el invierno Las técnicas serán no cruentas para las aves e inocuas para la ciudadanía.