El comandante del buque escuela, el capitán de navío Luis Carreras-Presas Docampo encabezó la comitiva que este viernes fue recibida en el salón de recepciones del Concello de Ferrol por representantes del ejecutivo local y del PSOE –BNG y Ferrol en Común estuvieron ausentes–, con el alcalde, José Manuel Rey, a la cabeza.
Como ciudad anfitriona no podía dejar pasar la oportunidad de recibir a los guardiamarinas antes de su partida, prevista para este sábado, a las 10.00 horas. 

Aunque la gran ausente fue la princesa Leonor –a las puertas del Concello los curiosos esperaban también poder verla–, lo cierto es que la veintena de cadetes alférez que se juntaron en el salón de recepciones se mostraron encantadores con la representación de la ciudad que se dio cita en el Concello –entidades vecinales, culturales, medios de comunicación, políticos, tejido empresarial, y representantes de Armada, Policía o Puerto–. No dudaron en hablar con los asistentes en pequeños corrillos, contando anécdotas y respondiendo a la curiosidad de los asistentes. Ferrol les encantó –o eso destacaron– y la entrada en la ría fue una de las más bonitas del crucero. Procedentes de Madrid, Andalucía, Murcia o Galicia, con dos ferrolanos en este tercer curso de formación, todos lamentan que llegue a su fin esta navegación que quedará marcada en su carrera, por haberlos llevado por tantos puertos del mundo.

El alcalde, José Manuel Rey, recordó la vinculación de Ferrol y la Armada, y señaló que fue una de las bases navales más importantes. Se dirigió a los guardiamarinas esperando que se les haya correspondido y que se lleven muchos recuerdos de la ciudad, del barrio de A Magdalena, el castillo de San Felipe, el Arsenal militar o Navantia, además de las playas, donde alguno de los guardiamarinas ha hecho incluso su bautismo de surf.

Finalizó su intervención deseando a los  jóvenes que “el viento les sea favorable”  y compartió un brindis con todos los asistentes, por Ferrol y por la Armada.