EN koruño se diría que “cheira a Bens” para definir el olor que ayer por la mañana inundó la franquicia local del PSdeG. El exdiputado y se supone que otra vez candidato Ricardo García Mira activó la sirena. Al parecer, alguien había falsificado su firma y su nombre figuraba entre los avalistas de uno de los candidatos en las primarias, cuando, se supone, él tiene que ir con el otro. Mar Barcón reaccionó de inmediato y activó los mecanismos para que la comisión de Garantías se hiciese cargo del asunto. Inmediatamente, García Mira reculó y anunció que estaba todo aclarado, que lo había llamado un militante –por supuesto, no desveló la identidad del supuesto falsificador– para disculparse y decirle que había firmado en su nombre pensando que esa era su opción... ¿Tanto miedo dan los peritos calígrafos?