La Comisión Europea (CE) y el Banco Central Europeo (BCE) instaron ayer al Gobierno español a acabar las reformas en curso e impulsar ya algunas aún pendientes que son consideradas claves, como la de los servicios profesionales.
“Las reformas pendientes tienen que ser ahora finalizadas, como la ley de unidad de mercado, o deberían ser complementadas con medidas adicionales para hacer frente a la segmentación en el mercado laboral”, señalaron ambas instituciones en sus conclusiones de la tercera misión de supervisión posterior al programa de asistencia financiera para la banca española.
El comisario europeo de Asuntos Económicos y Financieros, Pierre Moscovici, afirmó que las reformas acometidas en España en los últimos años “han ayudado a crear las condiciones para una recuperación económica más fuerte” y que las “señales alentadoras” que se observan en el país “son muy bienvenidas”. No obstante, recalcó que “permanecen importantes retos, y para afianzar los progresos “es esencial asegurar una implementación eficaz de las reformas ya acordadas y completar la adopción de aquellas que están siendo debatidas”.
En este contexto apuntó a medidas para hacer el mercado laboral más incluyente, con el fin de completar la ley de unidad de mercado, y a la aprobación de la reforma para liberalizar los servicios profesionales como acciones “particularmente importantes”, ya que beneficiarían a toda la economía.
Para la CE y el BCE, que visitaron España del 12 al 18 de este mes, “hay demoras notables en la implementación y riesgos derivados de la necesidad de una actuación común en los diferentes niveles” del Estado español, entre el Gobierno central y las autonomías.
Las instituciones observan “progresos adicionales” en los últimos meses en el campo de las reformas y citan las de la administración, la educación y el marco para insolvencias, entre otras, a la vez que mencionan iniciativas para apoyar la integración en el mercado laboral, luchar contra la dualidad y para mejorar las políticas activas, que todavía no han desarrollado plenamente su potencial.
Advierten de que “permanecen importantes desequilibrios” en la economía española, por lo que la “completa y eficaz” implementación de la agenda de reformas y su reforzamiento “son primordiales” para sostener la recuperación, el mayor reequilibrio de la economía y el mantenimiento de la prima de riesgo en cotas bajas en lo sucesivo.
Entre otras cosas, las instituciones consideran que hace falta un “ajuste más pronunciado” en la cuenta corriente para reducir la elevada tasa de pasivos externos, así como seguir impulsando el desendeudamiento del sector privado.
El acceso al crédito, en particular para los hogares y compañías más sanas, incluidas pymes, con perspectivas positivas de crecimiento, “ha mejorado de manera importante”, y la creación de empleos “se ha acelerado”, según aseguraron.