En el año 1999 la Xunta empezó la recuperación de la raza autóctona del can de palleiro, iniciando la prospección y búsqueda de ejemplares. No obstante, llegó un momento en que la administración dio por concluida su labor de campo y, a partir de ahí, este trabajo tuvo que cogerlo una iniciativa privada. Es entonces, en el año 2002, cuando nace el Club Can de Palleiro que protege y difunde esta raza de cánidos, siempre bajo la supervisión de la Xunta, que es la propietaria del libro genealógico.
Ernesto Fernández ha sido presidente de la entidad prácticamente desde el comienzo de su andadura. Esto lo convierte en todo un experto en estos animales.
¿El can de palleiro es la única raza canina puramente gallega o existen más?
Hay otras tres que son: el can guicho o quisquelo, el podengo gallego y el perdigueiro galego. Son tres razas de pequeño tamaño y que se emplean para la caza menor. Hoy en día, aunque están reconocidas como razas gallegas, prácticamente han desaparecido. La única especie que continúa y que se está recuperando es el can de palleiro.
Precisamente, hace unos años estuvo también al borde de la extinción, ¿cuáles fueron las causas?
Por desgracia, es por nuestra propia manera de ser que hace que siempre pensemos que lo que viene de fuera es mejor y no valoremos lo nuestro. El declive del can de palleiro se inició cuando empezó a cruzarse con otras razas, tales como pastores alemanes, pastores belgas o todas aquellas extranjeras que venían para caza. Ahí es cuando comenzó, pero hasta aquel momento el can de palleiro era el perro por antonomasia del agro gallego.
Por lo tanto, ¿que la gente se dedique a hacer cruces supone una amenaza para la raza?
Claro, pero eso es lo que estamos intentando evitar desde el club, que se críe en pureza racial para recuperar la especie. Todavía se localizan ejemplares en la zona rural que han subsistido sin apenas cruzarse con ninguna otra raza. Esos son los que estamos intentando identificar y a partir de ahí, ir criando entre palleiros de los que ya están determinados sus orígenes.
En la actualidad, se ha superado la cifra de los 1.000 ejemplares vivos existentes ¿sigue considerándose que la raza está en fase de recuperación?
Sí, todavía está el registro fundacional abierto –donde se inscriben los perros que se localizan y que cumplen las características de la especie– porque siguen apareciendo ejemplares. Aunque, aproximadamente, tenemos 1.400 inscritos y 1.000 es la cifra teórica que marcan las publicaciones para que una raza deje de considerarse en peligro de extinción, todavía son pocos.
El total de ejemplares registrados actualmente, ¿es un incremento muy grande desde el comienzo de la andadura del club?
En efecto, se empezó solo con nueve perros.
¿Qué iniciativas lleva a cabo la Consellería de Medio Rural para la recuperación de la especie?
Ellos delegan el “trabajo de infantería” en el club, pero toda nuestra labor está supervisada por la Consellería. De hecho, dos veces al año tenemos una reunión para dar cuenta de nuestro trabajo. Además, toda la documentación –las inscripciones, pedigrí– se envía al centro de recursos zooxenéticos de la Xunta y ellos la supervisan, la refrendan con su firma y envían a los propietarios los justificantes correspondientes.
Están también realizando la genealogía de la raza ¿podría explicar un poco este proyecto?
Ahora mismo tenemos en marcha varias iniciativas pioneras en España. A todos los cachorros que nacen se les hace un análisis de paternidad y las muestras de sangre que se obtienen se guardan en un laboratorio de la Xunta. Por otra parte, en la facultad de Veterinaria de Lugo tenemos un banco de semen para prevenir, en el futuro, lo que ha pasado hasta ahora. Además, disponemos de un programa informático para organizar los cruces, evitando consanguinidades y cruzar entre ellos perros que no se debería. De cara al futuro, nuestra idea es llegar a hacer el mapa genético del can de palleiro.
Aparte de esto realizan actividades para promocionar la raza como monográficos, concursos de fotografía, senderismo o canicross ¿Tienen en mente añadir alguna actividad a las citadas?
Nuestra intención sería que, en el futuro, el can de palleiro pudiese participar en las exposiciones que organiza la Sociedad Canina Española.
Actualmente cuentan con ejemplares inscritos en el club procedentes de otras comunidades e incluso de países extranjeros, supongo que las campañas de difusión que han llevado a cabo en las redes han contribuido mucho a ello, ¿no?
Si, tenemos perros por muchas partes de España: Madrid, Barcelona, Bilbao, Almería, Valencia, León y después también en países extranjeros como Portugal, Marruecos, Holanda, Inglaterra, Ucrania, Uruguay, Argentina o Brasil, entre otros.
¿Qué le diría a alguien que desee adquirir un cachorro para convencerle de que el can de palleiro es su perro idóneo?
La principal virtud del can de palleiro es su carácter dócil que hace que sea el perro ideal para las familias. Es un perro de pastoreo y como tal se acostumbra con facilidad a vivir en un piso, aunque no sería lo ideal. Se lleva muy bien con las personas y no tiene problemas con otros perros. No es pendenciero, ni agresivo, aunque es desconfiado con los extraños. Es muy amante de su casa y fácil de adiestrar.
¿La presencia de “Allo” y “Loira” en los anuncios de Gadis supuso un impulso para la promoción de la raza?
Por supuesto, estaremos siempre agradecidos a la empresa de supermercados por acordarse del can de palleiro. En el momento en que salió la publicidad, supuso una inyección de entusiasmo y de conocimiento de la especie. La gente se dirigió a nosotros interesándose por el perro y en cómo hacerse con un ejemplar.