La actriz Sabela Arán contribuyó a enriquecer la ficción gallega con su excelsa interpretación de Socorrito en la película “A Esmorga”, que en su caso, como fan de la novela de Blanco Amor, es un sueño cumplido, y ahora quiere hacer realidad otro: “Poder interpretar a un hombre”. Nacida en Santiago en 1987, esta licenciada en Comunicación Audiovisual siente envidia ante los personajes masculinos a los que da vida Blanca Portillo, porque cree que es “una experiencia interesante”