Primera toma de contacto para los nadadores en el arranque de la temporada de la mano de un Campeonato de España absoluto que reunirá en Gijón de mañana viernes al domingo a un significativo número de nadadores. Una cifra que, sin embargo, dista mucho de ser tan amplia como en ejercicios anteriores toda vez que la Federación Española ha endurecido las mínimas para    acceder a esta primera gran competición de la campaña. 
Cada una de las pruebas en liza se dirimirá por un sistema de mangas con tiempos comparados, de tal forma que no se disputarán finales. Ello hace posible reducir la programación pero, sobre todo, permite que algunos nadadores hayan podido inscribirse en un número de pruebas superior al habitual. Así, por ejemplo, tanto Marcos García Soto, del Natación Ferrol, como Tomás Manso Fraga, del Marina, nadarán en seis citas distintas, el máximo posible. Junto con ellos, afrontarán este nacional la también nadadora del Natación Ferrol Laura Santalla y la integrante del Náutico Narón Raquel Fernández Teijido.
De todos ellos, Marcos García es, sin duda, el que parte con mayores opciones de acercarse a los puestos de podio en varias de las distancias en las que ha programado su concurso. 
Al tratarse de la primera competición “seria” del año, el rendimiento de los participantes es incierto, más en una campaña olímpica en la que la preparación de los aspirantes a acudir a Río de Janeiro’2016 está condicionada por la gran cita estival. Ello incrementará la incertidumbre que siempre albergan estos primeros meses de la temporada en cuanto a rendimiento se refiere. 
Las aspiraciones del resto de nadadores locales son más discretas en términos absolutos, más teniendo en cuenta que, por ejemplo, Tomás Manso, es todavía infantil y sus aspiraciones pasan por mejorar marcas y acercarse a mínimas para otros campeonatos. También las de una Laura Santalla que ha dado un paso más esta campaña en su preparación trasladando su domicilio a Pontevedra con el fin de que, aunque sea de forma externa y sin beca de carácter autonómico, poder trabajar bajo las órdenes de los técnicos Luisa Domínguez y Fernando Zarzosa en el Centro Galego de Tecnificación Deportiva con los mejores nadadores gallegos.