La joven que denunció haber sido violada en los Sanfermines de 2016 por cinco chicos que se autodenominaban “la manada” lo hizo muy afectada y “desconsolada”, según las técnicas del Ayuntamiento de Pamplona que la atendieron, que confirmaron en el juicio la versión de la joven.
Así lo señaló el abogado de la chica, Carlos Bacaicoa, tras concluir la quinta sesión del juicio, en el que prestaron declaraciones las técnicas municipales que atendieron a la joven, quien reconoció que no había podido oponer resistencia contra la agresión por que se encontraba “en shock”.
Ratifican su testimonio
El abogado Bacaicoa considera que la declaración de las técnicas ratifica el testimonio de su cliente de que fue víctima de una violación por parte de los cinco jóvenes andaluces acusados, que en uno de sus grupos de “Whatsapp” se denominan “la Manada”.
Bacaicoa también explicó que la defensa de los acusados aportó a la causa una imagen, obtenida por un detective privado de las redes sociales de la joven, de una camiseta con el lema “Hagas lo que hagas, quítate las bragas”. Para la defensa de los acusados, la publicación en Instagram de esta imagen por parte de la joven puede ayudar a valorar la veracidad o no de la denuncia de violación presentada.
Polémicas pruebas aceptadas
La polémica por la inclusión en el juicio de unas pruebas, y no de otras, por ejemplo las relativas a los comentarios del “whatsapp” de los acusados, con comentarios acerca de abusar de jóvenes en las fiestas”, suscitaron una fuerte polémica y críticas al tribunal.
La Asociación Nacional de Agencias de Detectives Privados defendió que la investigación se realizó “dentro de los límites legales”.“Los detectives no prejuzgamos ni valoramos, aportamos información veraz obtenida legalmente” dice la Asociación, sale así al paso de las críticas que ha suscitado la citada investigación, cuyo contenido es de “carácter reservado”.
Y añaden que, “con independencia del citado informe, que a día de hoy se desconoce, defendemos su realización en defensa de los intereses legítimos del interesado; entre otros supuestos, para que la justicia pueda cuantificar el daño real de determinadas secuelas, a la hora de determinar posibles indemnizaciones y responsabilidades penales”. l