La comparsa Tróupele Tróupele de Narón se hizo ayer con el primer premio del festival de comparsar que volvió a llenar de sátira y humor el escenario del Pazo da Cultura en el que se citaron las diez agrupaciones participantes. Esta fue la única propuesta que “sobrevivió” de la programación a las inclemencias meteorológicas que aguaron la mayoría de los festejos previstos para la jornada en los distintos municipios.
Junto a ellos fueron también premiados A Canteira, de Neda ,y Semente de Trasancos, de O Val. El jurado no solo reconoció con estos galardones –se les hizo entrega de una pieza de artesanía– la originalidad de sus vestimentas, sino también la creatividad mostrada en su repertorio, la calidad vocal de los intérpretes y su música y la recuperación del Entroido.
Las relaciones de los concellos de Ferrol y Narón, las políticas del PP en Madrid, las inversiones a realizar en la localidad, el pasado y el futuro de la corporación local o el saneamiento de la ría de Ferrol fueron algunos de los asuntos que centraron la temática de las canciones interpretadas por las comparsas que pusieron una vez más su ingenio al servicio de las reinvindicaciones.
Los encargados de entregar los premios fueron la vicepresidenta del Padroado y alcaldesa en funciones, Marián Ferreiro, el gerente del Teatro Colón de A Coruña, Valentín Rodríguez, y Rosi Caneiro, en representación de la empresa Tedaga.
en la comarca
A la ya anunciada suspensión de la programación en Cedeira –el festival de comparsas se trasladará al domingo 14–, ayer se sumó la de Ortigueira. La alerta naranja por temporal impidió la celebración de las actividades previstas para la Alameda. Si bien la fiesta de Entroido para los más pequeños se canceló, el concurso de dulces se trasladó al Claustro del Concello.
En Moeche, la AVV de Labacengos mucho más previsora, celebró una comida de Entroido en la nave de Ventoeiro que por la tarde acogió un baile de disfraces con premios para los más originales. Cariño también se vio obligado a suspender los actos previstos a excepción de la degustación de “chaolas” que se trasladó al local social.