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martes | 7 mayo | 2024
La CIG hizo públicas ayer varias de sus reivindicaciones respecto a la situación del naval en la ría de Ferrol. Sus propuestas se centraron en el astillero de Fene, que al juicio de sus representantes es el más castigado de la comarca. Para la Federación Industrial del sindicato nacionalista, el levantamiento real del veto pasa por conseguir carga de trabajo para ese lado de la ría.
Xoán Xosé Bouzas, representante del área industrial, anunció que pedirán para sus gradas “dous dos catro buques petroleiros que Navantia ten pensado construir”. “Non queremos facer trozos de barcos para que os monten noutro sitio. Queremos facer aquí todo o buque e volver a encher Navantia Fene de persoal de xestión, técnico e productivo”, demandó el representante de la CIG.
comparaciones
El sindicato gallego también denunció el agravio que existe respecto a los astilleros del sur de España, dónde la carga de trabajo es mayor. Por ello, pedirán una reunión con los responsables de la SEPI para que les informen de la situación real de actividad en toda la empresa y expliquen esa “derivación de trabajo” hacia la bahía de Cádiz.
Otra de las reivindicaciones que ha dejado patente el sindicato tiene que ver con el papel que está jugando la Xunta de Galicia en este contexto de crisis del naval. La CIG considera que el gobierno autonómico debería “dala cara” por los astilleros gallego y “non conformarse coas migallas” que recibe Navantia en la ría. Además, el sindicato apuesta porque la Xunta forme parte del Consejo de Administración del astillero y tenga una participación “directa y activa” a la hora de exigir soluciones.
movilizaciones
Tal y como han venido haciendo otros sindicatos y el propio comité de empresa de Navantia, la CIG animó ayer a los vecinos de la comarca a sumarse a la movilización programada para el próximo día 13 de diciembre, una marcha reivindicativa en plena campaña electoral que pretende sacar a la calle a miles de trabajadores y ciudadanos.
El presidente de la Federeación de Industria de la CIG, Xoán Xosé Bouzas, defendió que “debe ser unha reivindicación social, para dicirlle ao goberno que non se pode quedar impasible ante a situación de desemprego que sofre a comarca”.
