Se va a cumplir una década desde que un grupo de personas, integrantes de los órganos ejecutivos de Cáritas Diocesana de Santiago, ponían en marcha un proyecto para conseguir los mejores resultados en el reciclado textil. Aquella iniciativa- con el nombre de Arroupa se gestó a través de la Fundación Cáritas Diocesana de Santiago (Cadisan) reconocida por la Xunta como de Interese Galego y que nace en 2015 como impulsora de iniciativas que promueve empresas de inserción laboral como herramienta de inclusión y lucha contra la exclusión social.
Transcurridos diez años Arraoupa se ha consolidado en el mercado. Una constatación de lo que decimos es que el Grupo Social ONCE le ha concedido el premio solidario por una labor que busca ayudar a los más vulnerables. Un galardón que reconoce el trabajo de Arroupa-Moda Re que combina la economía circular con la acción social. Un proyecto promovido por la entidad de ayuda que trabaja en el campo de la recogida, reutilización y reciclaje de ropa usada. Una producción que se desarrolla con el reciclado textil con la finalidad de fomentar la economía circular y generar empleo para personas en riesgo de exclusión. En la actualidad cuenta con 37 trabajadores –8 son permanentes– que se forman en sus instalaciones y siguen un itinerarios de inserción que suelen durar tres años. Hasta el momento 79 personas han sido acompañadas en el desarrollo de sus respectivos itinerarios laborales.
Uno de los pilares de Arroupa es la sostenibilidad como se señala en una Memoria en la que se dice que actúan bajo criterios éticos y estándares de eficiencia, que favorece las relaciones laborales respetuosas, que promueve el respeto a los derechos humanos, fomenta la transparencia y la comunicación, y contribuye a la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030.
El nacimiento de la empresa se hizo desarrollando en plenitud la razón de ser de Cáritas que en más de medio siglo de existencia lo viene haciendo con las personas más necesitadas. De este modo se responde a las demandas sociales, técnicas y medioambientales que reclama la sociedad actual, apostando por la promoción de la economía social e impulsando empresas de inserción laboral.
El trabajo queda reflejado en los miles de toneladas de ropa reciclada con las que trabajan todos los años –más del 63% de las prendas clasificadas en la planta fueron reutilizadas. Dispone de más de dos centenares de contenedores distribuidos por numerosos lugares de la diócesis, y en su funcionamiento la empresa tiene un destacado impacto social, ambiental y económico. Además de gestionar puntos de recogida cuenta con tiendas solidarias –ropa de segunda mano y restos de stocks– en Santiago de Compostela, A Coruña, Pontevedra, Arteixo y Carballo.
En el Teatro Colón de A Coruña se hará un reconocimiento expreso y muy significativo para una empresa que por medio del reciclado textil genera puestos de trabajo entre las personas más vulnerables.