El final de las obras de la avenida de As Pías se dibuja desde hace semanas en el horizonte, pero parece resistirse a llegar. El pasado día 4, la subdelegada del Gobierno en A Coruña, María Rivas, afirmó que la inauguración de la infraestructura era cosa de “semanas”, aunque rechazó dar una fecha concreta, algo que reafirmó poco después el secretario xeral del PSdeG, Ramón González Besteiro, que se mostró confiado en que el acto tendría lugar antes de que finalizase julio.
No obstante, a menos de cinco jornadas para que acabe el mes, la cita sigue sin programarse, lo que empieza a generar descontento entre los vecinos, que desde hace tiempo ven a diario el vial terminado pero las vallas aún en pie. Ayer mismo, todos los semáforos del último tramo se encontraban operativos y la señalización horizontal de la avenida, así como el área de aparcamiento, lucía recién pintada, lo que da muestra del punto en el que está ya el proyecto.
Así, desde la AVV de Caranza se señala que las obras en sí ya están acabadas pero que, al contrario de lo sucedido con los tramos anteriores, el Gobierno no quiere inaugurar el definitivo hasta que esté finalizado al 100%. En este sentido, la presidenta de la entidad, Mapi Rodríguez, explica que únicamente resta por acometer el desbroce del margen más próximo a O Bertón, aplicar una pequeña capa de aglomerado en la vía auxiliar de Juan de Austria, la instalación de un pasamanos central en Marqués de Santa Cruz y el plantado de algunos árboles adicionales en el área de juegos infantiles –estas dos últimas actuaciones a petición de la propia asociación–. De igual modo, aunque no se contemplaba en el proyecto inicial, también se arregló el firme de la conexión de la avenida con el puente de As Pías, un segmento todavía pendiente de ser pintado.
En cualquier caso, desde la AVV se lamentó la negativa del Ejecutivo a abrir el tramo y retrasar la inauguración hasta que se finalicen los mencionados detalles, explicando que desde que se cerró el vial los funcionarios y estudiantes que trabajan en otros municipios deben desplazarse a Fene o a la estación de autobuses para acceder al transporte público. Así, plantean que se podría volver a habilitar la parada de Caranza para evitar más molestias a ambos colectivos hasta la celebración del acto.