El resurgir de Aquaciencia, un parque didáctico en el pulmón verde de Ferrol

El resurgir de Aquaciencia, un parque didáctico en el pulmón verde de Ferrol
El jardín didáctico necesita importantes obras antes de poder reabrir sus puertas I JORGE MEIS

El parque didáctico Aquaciencia está a punto de cumplir 25 años –se inauguró en junio de 1999– y espera llegar al cuarto de siglo viviendo su enésima resurrección. Este recurso educativo enclavado en el Raíña Sofía, que recibía a miles de escolares cada año, permanece cerrado desde la pandemia. Su exposición a los elementos, la falta de mantenimiento, el desgaste del paso del tiempo y, en ocasiones, actos de vandalismo, han jalonado su historia de idas y venidas, con períodos de cierre, obras de reacondicionamiento y también etapas en los que sus 21 ingenios hidráulicos lucían en todo su esplendor.


El gobierno local reservaba en los presupuestos de 2023, ahora prorrogados, una partida para revivir el jardín temático sobre el agua. Se dedicarán algo más de 100.000 euros a una actuación que había anunciado el ejecutivo anterior en noviembre de 2021 pero que no llegó a materializar y que tiene por objetivo reparar los elementos, acondicionarlos y sustituir lo que sea preciso para garantizar la seguridad. El proyecto –reactivado por la concejalía de Medio Ambiente, Servizos, Zona Rural e Obras, que dirige José Tomé– está cumplimentando sus últimos trámites técnicos antes de iniciar su tramitación para licitar las obras.


El recinto ocupa una extensión de 5.000 metros cuadrados y presenta carencias graves, como la deficiencia de pavimentos y de puentes de madera que, o bien son inexistentes o se encuentran en un estado ruinoso por la acción de los agentes atmosféricos y de la vegetación. Son, indica el informe técnico, “un peligro para los usuarios ya que hay riesgo de tropiezos (...) o por resultar resbaladizos en los días de lluvia”. 


Otro déficit detectado es que la central hidroeléctrica es inaccesible para personas en silla de ruedas, puesto que es preciso salvar seis peldaños. 


La antigua casa de los patos supone otro motivo de preocupación. Resulta prácticamente inaccesible al estar cubierta de vegetación –con consecuencias sobre la teja– y se ha modificado la cota original, por lo que parte del edificio se encuentra enterrado y con los huecos de fachada tapiados.

 

 

Las obras necesarias


El plan de acción incluye obras en el muro norte, en los pavimentos y puentes de madera, en la central hidroeléctrica y en la casa de los patos.


En el primer caso se procederá a la retirada de la vegetación existente en la zona de acceso al parque, tanto en la coronación del muro como en sus dos caras, para su posterior enfoscado y pintado, en piedra y en ladrillo.


En lo que afecta a los pavimentos de madera, se realizará una limpieza de las zonas verdes perfilando los laterales de las pasarelas y se repondrán las tablas que faltan o están estropeadas. Se prevé una limpieza para la posterior aplicación de un producto fungicida.

 

Aquaciencia dos meis
Vista de algunos elementos del parque I JORGE MEIS


Los puentes, dado su estado ruinoso, se retirarán en su totalidad para después analizar si alguno de los pavimentos puede ser reutilizable. Se aplicará también un producto fungicida y se sustiturán los elementos de apoyo y barandilla.


En la central hidroeléctrica se construirá una rampa accesible que permita salvar los 50 centímetros de desnivel entre la pasarela de madera de la fachada sur y la zona pavimentada de piedra de su acceso.


En la casa de los patos se realizarán los trabajos preciso para recuperar la imagen original del edificio. Para volver a la cota original está prevista la excavación del terreno y el desbroce y limpieza de la vegetación. Se sustituirá la teja existente y, además de la limpieza interior y exterior de los paramentos verticales (que se pintarán de blanco) se abrirán los huecos de fachada ahora tapiados y se instalará carpintería de madera en condiciones similares a la original. También se recuperará el balcón con la instalación de una barandilla de madera. 

 

 

un itinerario por el ingenio humano 

 

Aquaciencia recibe a los visitantes con una clepsidra, un reloj de agua que da una idea de lo que viene a continuación, inventos para aprovechar el agua y su fuerza con diferentes fines. Un acueducto, un ariete, la central hidroeléctrica, un sifón, noria de pedales y manual, prensa, hidrómetro, transbordador, un faro, un molino, bombas elevadoras, una turbina o demostraciones prácticas de teorías dan forma a un recorrido por 21 estructuras ideadas por el ser humano.

 

 

Un recurso atractivo con miles de visitas


El interés por el parque didáctico Aquaciencia no es solo escolar. En los momentos en los que recibía a miles de personas (más de 20.000 al año en los años 10) eran mayoría las visitas no concertadas previamente, según los datos que facilitaba el propio Concello. Este recorrido por la historia del aprovechamiento del agua resulta atractivo y divertido por sí mismo y constituye un elemento que revaloriza el parque Raíña Sofía, el mayor espacio verde que existe en el centro de la ciudad.  

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