“Lo que más de me ha gustado ha sido el coche de la Policía”, así se expresaba Pablo Allegue, de seis años, que visitaba ayer con su padre la exposición estática que la Armada sacó a los exteriores del Arsenal militar (a los jardines que se sitúan frente la plaza Vella) donde familias y muchos niños disfrutaron con todo el material que se exhibía. Los más pequeños se sentían entusiasmados al poder entrar en el vehículo de la Policía Naval, especialmente si encendían las sirenas. Los más mayorcitos, en cambio, se sentían más atraídos por las armas que había en la exposición de los equipos operativos de seguridad del Tercio Norte y por la Unidad de Buceo (Ubufer), donde se podía ver y manipular equipos actuales de su labor diaria, pero también un modelo antiguo de escafandra y traje muy pesado y rudimentario con el que se trabajaba en el pasado. “Es increíble que pudieran moverse con esto”, manifestaba una de las personas a Jorge Mateo, uno de los miembros de la unidad.
Por su parte, Nerea Chao, de siete años, afirmaba que había aprendido “a hacer dos nudos de marineros y me los llevo para mi casa”, manifestaba la pequeña, que mostraba orgullosa su trabajo. Una labor que pudo llevar a cabo de mano de los suboficiales de la Esengra, quienes animaban a los pequeños a realizar su propio nudo o llevarse alguna de las pulseras y demás elementos que se exhibían en este puesto y que ellos mismos hacían con cordones y material que portaban.
La muestra se configuraba en diferentes unidades temáticas. Nada más acceder al recinto, a mano izquierda, se ubicaba un punto de información sobre reclutamiento. También se hallaba un espacio con material anticontaminación. Sobre el mismo, aseguraba el jefe del Arsenal, Gonzalo Villar Rodríguez, que cuenta con una gran capacidad de reacción ante cualquier fenómeno. Asimismo, también había elementos pertenecientes al Centro de Instrucción de Seguridad Interior (CISI), ubicado en la Antonio de Escaño. Un centro en el que se imparten cursos antiincendios, entre muchos otros, y que está operativo todos los días del año en previsión de cualquier emergencia que pueda surgir en el mar. Otro de los puestos era el taller de nudos marineros, con exhibición de pulseras y elementos decorativos varios en el que disfrutaron tanto niños como adultos. Seguidamente se encontraba el lugar habilitado para la Policía Naval y todo su material de trabajo, como las pelotas de goma que se utilizan para dispersar o disolver manifestaciones o concentraciones. Elementos como las tradicionales esposas o el vehículo policial fueron los más comentados por las visitas.
También sacaron ayer su material al exterior los equipos operativos de seguridad del Tercio Norte, integrados por grupos de once personas que suelen acompañar a los buques cuando salen a la mar. Lanchas, material de escalada, trajes y armas llamaban la atención de cuantos pasaban por la muestra, muchos de los cuales se animaron a portar algunos de los fusiles y comprobar el peso de cada una de las piezas armamentísticas con las que cuenta esta unidad.
Para finalizar el recorrido nada mejor que conocer con detalle la labor que realiza la Unidad de Buceo del Tercio Norte, que se encarga del mantenimiento y reparación de las unidades a flote y dependencias subacuáticas, del salvamento y rescate en alta mar y aguas internacionales y la custodia y protección del patrimonio subacuático.
Uno de los responsables de la unidad explicó a los presentes que ante cualquier sospecha de algún objeto en el mar, se cataloga y estudia y se elabora un informe de riesgo de expolio. “En caso de que cualquier pieza o barco hundido pueda correr ese riesgo, nos encargamos de retirar ese material para su conservación. Muchas piezas del Museo Naval de esta ciudad o el de Vigo, que es el que lo recepciona primeramente, los ha extraído nuestra unidad de buceo de Ferrol”, indicó uno de los responsables de la Ubufer, que suele realizar labores de este tipo con gran asiduidad.
Durante la mañana y tarde de ayer fueron muchas las personas que aprovecharon la visita a la muestra estática situada en los jardines exteriores del Arsenal para recoger información en la oficina móvil de reclutamiento que se montó en el espacio expositivo.
Numerosos dípticos con un sistema de enlaces a través de códidos QR ofrecían toda la información necesaria para conocer las diversas formas en las que una persona puede entrar a formar parte de las Fuerzas Armadas en relación con la formación previa ya adquirida, instuyéndose como militar en un ambiente de trabajo “del que forman parte 120.000 hombres y mujeres que garantizan la defensa, seguridad y bienestar de la sociedad española”, indican desde el departamento de reclutamiento.
Es posible acceder a las cuerpo militar formando parte de las unidades de Tropa y Marinería; el cuerpo de suboficiales; oficiales y cuerpos comunes de oficiales, adscritos a cualquier ejército. En el stand informativo se ofrecían folletos informativos y revistas varias así como diverso material de merchandising sobre las Fuerzas Armadas en general.
Algunas de las personas que visitaban ayer la muestra estática instalada con motivo de la celebración del Día de las Fuerzas Armadas, como una familia de León que vino a la ceremonia de graduación de su hija el viernes y que paseaban por la zona, recibían con sorpresa la noticia de que también podían acceder al Arsenal y visitar la fragata F-102.
“Es un lujo venir aquí y poder ver todo esto y vamos a aprovechar, ya que nunca hemos visto una fragata por dentro”, explicaban tras enterarse que podían visitar también el recinto militar.
Y es que ayer fue el primer día de puertas abiertas en el Arsenal, siendo posible visitar la fragata F-102 “Almirante Juan de Borbón”, la segunda de la clase Álvaro Bazán, que estuvo accesible durante la mañana y hasta las siete de la tarde a la población civil. Fueron muchas las personas que se acercaron para conocer las instalaciones y el buque de guerra. Hoy también se podrá visitar el recinto militar, accediendo por la puerta de la Cortina (más próxima al muelle de Curuxeiras) desde las
, con un parón al mediodía.