Más de un millón de euros se invirtieron en el patrimonio diocesano a lo largo del año 2024, según el último informe presentado por la delegación de Patrimonio de Mondoñedo-Ferrol. En concreto fueron 1.040.260,15 euros repartidos en diferentes bienes muebles e inmuebles propiedad de la diócesis. 

La partida más cuantiosa refiere a las obras de rehabilitación de la iglesia de Dolores de Ferrol con 246.474 euros; seguida de los trabajos desarrollados en el Seminario de Santa Catalina de Mondoñedo, con 179.734 euros; la iglesia de San Miguel de Rigueira (Xove), con 168.555 euros y la iglesia de San Xosé Obrero de Narón con 130.449 euros. Junto a ello se detallan intervenciones en otros nueve edificios más, que suman el millón de euros invertido.

En cuanto a la relación de intervenciones en el patrimonio diocesano que se incluyen en el capítulo de bienes muebles se han hecho restauraciones al menos en seis bienes. La intervención más grande se ha llevado a cabo en la parroquia de San Nicolás de Neda, donde se restauró el retablo con una inversión de 80.000 euros, procedente de fondos propios. En otros lugares se realizaron pequeñas intervenciones en restauraciones de imágenes devocionales, com indican desde la Diócesis.

Para toda esta destacada inversión, la cuantía más importante ha sido aportada por la Xunta de Galicia a través de los diferentes convenios de colaboración que tiene establecidos con la diócesis de Mondoñedo-Ferrol y con el resto de las diócesis gallegas. En concreto, la administración autonómica invirtió en este patrimonio, legado de nuestros mayores y que es seña de identidad de muchos de nuestros lugares, la cantidad de 390.000 euros.

Junto a ello, la propia diócesis invirtió otros 386.041 euros en diferentes obras de mantenimiento y en ayudas para las intervenciones realizadas y promovidas por las propias parroquias.

Explican desde la administración diocesana que “también las parroquias realizaron sus aportaciones en un ejercicio de responsabilidad” en el mantenimiento de sus propios edificios: en concreto, 253.638 euros fueron aportados por las propias feligresías. A estas colaboraciones se unieron algunas asociaciones vecinales, “que cada día colaboran más en el mantenimiento del patrimonio cultural”.

Las propias feligresías aportaron 253.000 euros

Asimismo,  el Concello de As Pontes hizo una aportación para el pintado exterior del templo parroquial de Santa María, añaden.

Desde la diócesis se agradecen estas colaboraciones “que muestran el profundo interés por nuestro patrimonio que es de todos y por conservar nuestras señas de identidad”, y se anima a incrementar estas redes de colaboración público-privadas que lleven a un mejor mantenimiento de todo este patrimonio.

San Martiño do Couto
 

La diócesis de Mondoñedo-Ferrol ha realizado obras de consolidación y mantenimiento en el monasterio de San Martiño do Couto, en Narón. Se trataba de una intervención de urgencia para evitar la caída de piedras y de muros, limpieza de la maleza en tejados y fachadas e intentar detener el progresivo deterioro del inmueble. Las obras principales se realizaron en aquellas estancias más deterioradas, que corresponden con el horno y la cocina. De esta manera, con estas actuaciones de conservación, “se permite el acceso con seguridad a estas estancias”, indican.

La diócesis de Mondoñedo-Ferrol, a través de la delegación de Patrimonio, está a la espera de elaborar un proyecto que permita destinar este bien a usos culturales, formativos y religiosos, vinculado a la Camino de Santiago. Mientras se concreta “este proyecto de futuro estas obras han sido muy bien acogidas por los visitantes y feligreses de la parroquia”, aseveran.

Como se recordará, el año pasado en el monasterio se habilitó ya un punto de acogida para peregrinos que se sumó a otro abierto en la iglesia del Socorro en Ferrol.  En el Xuvia permanece abierto a diario por las mañanas (de 11.00 a 13.00 horas) gracias a la colaboración de voluntarios. Durante los fines de semana el servicio de atiende una hora más, de 10 a 13 horas. 

Más de 5.500 peregrinos habían sellado sus credenciales hasta 2024 en templos y espacios de la diócesis local.