Las cuatro primeras “jackets” de Saint Brieuc se encuentran ya rumbo a la Bretaña francesa

Las cuatro primeras “jackets” de las 62 que componen el contrato de Iberdrola con la UTE Navantia-Windar para su parque de Saint Brieuc, ya se encuentran rumbo a la Bretaña francesa. El envío, el primero de los siete programados para el presente verano de acuerdo al cronograma establecido por la eléctrica, sufrió un ligero retraso por causas ajenas al grupo naval, saliendo de puerto un día más tarde de lo inicialmente planeado.

A pesar de esto, el proyecto continúa sin demoras de importancia y, de darse las condiciones meteorológicas y marítimas adecuadas, estas primeras cuatro estructuras deberían llegar al puerto de Brest a comienzos del fin de semana. Así, tal y como apuntaron el pasado martes los responsables del proyecto durante una intervención ante los medios en el astillero de Perlío, los planes de Iberdrola pasan por instalar las 28 primeras “jackets” a lo largo del presente verano, por lo que en los próximos tres meses se realizarán otros seis envíos de cuatro unidades.

De igual modo, según destacó la eléctrica por medio de un comunicado, la firma responsable del traslado de estas cimentaciones será la neerlandesa Van Oord, que cuenta para el mismo con dos barcazas de 122 metros de eslora.

Por otra parte, los pilotes que fijarán las estructuras al fondo marino, fabricados por Windar en Avilés, ya se encuentran fijados, por lo que los trabajos de instalación del parque eólico marino –el primero de Iberdrola en Francia– deberían comenzar de forma inminente. Este parque, además, utilizará una nueva tecnología para el anclaje de las “jackets”; un “innovador dispositivo hidráulico”, como lo denominó la eléctrica, conocido como “pile grippers” que ofrece una mayor fijación que las sujeciones tradicionales y una mayor estabilidad durante la instalación de las estructuras.

Finalmente, desde Iberdrola se señaló que, una vez entre en operación en 2023, el parque de Saint Brieuc tendrá una capacidad de generación de 500 megavatios, suficiente para satisfacer el consumo de 835.000 personas.