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martes | 23 abril | 2024
El Gobierno dirigió ayer un mensaje a los barones territoriales del PP, citando expresamente a Alberto Núñez Feijóo, y puso en duda que el líder de su partido, Pablo Casado, esté en “condiciones” de regresar “a la senda de la responsabilidad” y de colaborar en la renovación de los órganos constitucionales, un día después de constatar que el presidente “popular” se mantiene en “la estrategia del bloqueo”.
“Este país necesita una oposición centrada, constructiva y leal a los intereses de España. Necesita que el PP regrese a la senda de la responsabilidad, que lo haga el señor Casado y si Casado no está en esas condiciones, que lo haga el PP en su conjunto”, señaló la ministra de Hacienda y portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.
Montero se mostró “convencida” de que muchos “militantes y dirigentes” del PP –citó expresamente al presidente de Galicia, Alberto Núñez Feijoó– “entienden que hay que renovar con absoluta normalidad, cumpliendo la ley y la Constitución, los órganos que hace más de un año se tenían que haber renovado”.
Como rehenes
Es más, la portavoz advirtió de que “no se entiende” que quien se autoproclama constitucionalista, “no cumpla la ley y la Constitución” y decida usar a las instituciones “como rehenes” por sus intereses partidistas.
Se refería así la portavoz al fracaso de la entrevista que mantuvieron el lunes en Moncloa el presidente del Gobierno y el líder de la oposición, Pablo Casado, en la que este condicionó la colaboración a que Sánchez asuma prácticamente el programa del PP, rompiendo las negociaciones con los independentistas e incumpliendo compromisos adquiridos con Unidas Podemos.
Montero recordó al PP que su tarea como principal partido de la oposición es “ennoblecer las instituciones, no desprestigiarlas” y remarcó que el Consejo General del Poder Judicial, el Tribunal de Cuentas o el Defensor del Pueblo son instituciones necesarias para el funcionamiento cotidiano del país.
La portavoz quiso recalcar que la mano del Gobierno seguirá tendida al PP para cuando este partido abandone “la política de obstrucción y de bloqueo” y deje de “vetar” la renovación de estos órganos porque es una “forma de deteriorar las instituciones”.
Montero advirtió de que el PP “no ha entendido” que uno de los principales problemas ciudadanos es “el desapego” de la política por la percepción de que las instituciones “no se preocupan de los problemas cotidianos, no hacen política útil y por tanto no sirven para el interés general”.
Tras dejar claro que la oposición de derechas no conseguirá impedir que el Gobierno despliegue su “proyecto de país”, reiteró la disposición del Gobierno a colaborar con el PP en cuanto este abandone la “estrategia de la crispación y vuelva a ser un partido con sentido de Estado”.
La primera reunión del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, con el líder de la oposición, Pablo Casado, de esta legislatura solo sirvió para confirmar el desencuentro entre ambos, sin que hayan habido avances importantes en ninguno de los temas en los es necesario un acuerdo.
Tras una hora y media de reunión se costató que persiste una situación de “bloqueo” de la que los dos principales partidos insisten en culparse mutuamente.
