En el mundo económico global, existe un enemigo silencioso que afecta la forma en que uno vive, ya sea por el medio de transporte, los pasatiempos que realiza e incluso algo tan básico como la alimentación: este no es otro que la inflación.
Se trata de un fenómeno que demuestra una inestabilidad económica dentro de un país, y en España esto no es algo nuevo, razón por la que a continuación se explicará en qué consiste y en qué se relaciona con la economía actual española.
Por lo general, los economistas establecen cuándo ocurrirá una inflación a través de plataformas de trading con la cual se puede calcular, por ejemplo, el índice US Tech 100 o el IBEX 35. No obstante, para el ciudadano común es más complicado de detectar antes que sea demasiado tarde.
Para empezar, la inflación no es más que el aumento constante de los bienes y servicios dentro de un país y durante un período de tiempo. En palabras más simples, el valor de la moneda local disminuye y el coste de los productos y servicios aumenta.
Por supuesto, esto no interrumpe la realización de eventos locales o nacionales como la Feira da Cervexa; sin embargo, puede afectar el coste de los servicios ofrecidos en ellos.
Aunque el fenómeno suele traer consigo las mismas consecuencias sin importar si se vive en Ferrol o en otra localidad española, hay tres formas en la que una inflación se manifiesta, cuyas causas pueden ser sociales o políticas:
Actualmente, España cuenta con una inflación moderada que no supera el 3 %, aunque entre los años 2021 y 2022 alcanzó un valor del 8,4 %, según la Encuesta de Presupuestos Familiares realizada en dichos años.
Cuando una región se enfrenta a una inflación galopante o una hiperinflación, el valor de la moneda local se reduce, lo que a su vez crea un efecto dominó que trae consigo estas consecuencias adicionales:
● Pérdida de poder adquisitivo: aunque se cobra lo mismo por el trabajo realizado, el precio de los productos y servicios aumenta, lo que hace que las personas no puedan comprarlos en la misma cantidad.
● Menor capacidad de ahorro: a menor poder adquisitivo, menor posibilidad de ahorrar.
● Inestabilidad económica: debido a la incertidumbre de si la economía mejorará o no, las empresas se ven obligadas a aumentar el coste de sus servicios y reducir el salario de sus empleados.
● Desigualdad socioeconómica: se presenta una clara desigualdad en la sociedad según su poder adquisitivo, en especial para aquellos cuyo poder adquisitivo no es lo suficientemente alto como para costear los productos, bienes y servicios básicos.
● Reducción del valor del patrimonio: el valor de los hogares de Ferrol y otras localidades disminuye, lo que vuelve el negocio de venta de inmuebles menos rentable.
Finalmente, un país con un alto índice inflacionario suele presentar un PIB bajo, lo que trae como consecuencia adicional que los inversionistas no tengan interés en invertir su dinero en dicho país, ya que las garantías de obtener alguna ganancia de ese negocio son muy bajas.