El nuevo traje del Intasa para el 2019 es “vintage” y se llama Costa

El nuevo traje del Intasa para el 2019 es “vintage” y se llama Costa
voleibol entre el Intasa y el Manacor

Hacia atrás solo para coger carrerilla. Y eso es lo que le sucedió el pasado fin de semana a un Intasa que en el duelo más importante de este final de año, el disputado ante el Manacor, sintió que sus opciones de permanencia se alejaban un poco más. Un importantísimo toque de atención que ha llevado a la entidad de San Sadurniño a replantearse el que será un 2019 decisivo en su camino, en su historia. Y a tomar un nuevo impulso para lo que resta de competición.
Al igual que en un armario, para que lo nuevo entre, hay que deshacerse de lo “viejo”, de lo que ya no uses o de aquello que pensabas que te iba a quedar bien pero que, una vez en casa, no es así. Los del Aldebarán ya hicieron esos cambios de vestuario poco antes del inicio liguero con la marcha de un francés Bastian Peralta que resultó no ser de la “talla” adecuada –el canadiense Girard llegó poco después para cubrir ese hueco– y ahora quieren probar con un nuevo “traje” para luchar por la permanencia. ¿Y qué es lo que sale? Pues el ruso Dimitri Baranov. El central internacional llegó para convertirse en un revulsivo en las filas locales, si bien, y aunque con momentos de gran calidad, su juego no terminó de explotar en las filas de la formación azul. 
Una situación que, unida a la marcha del equipo y a problemas con el visado del voleibolista –en su incorporación se informó a la entidad que tenía visado Shengen, cuando en realidad era turista–, llevaron a decidir por ambas partes la desvinculación de Baranov del vestuario de San Sadurniño. 
¿Y qué es lo que entra? Pues algo “vintage”, el brasileño Saulo Costa, siempre un seguro de vida en la formación local y más ahora cuando el grupo azul necesita un completo cambio de indumentaria. El de São Paulo afrontará así su tercera etapa en “casa”, volviendo a vestirse de corto tras anunciar su retirada del voleibol profesional –si bien en Bali, donde estaba residiendo, seguía muy vinculado a esta disciplina, así como otros proyectos como el campus realizado el pasado año para niños y niñas con la Federación Italiana–, jugando así finalmente con el Intasa en la máxima categoría del voleibol nacional. 
Un retorno que se hará efectivo, si toda la burocracia funciona, a principios de enero, por lo que el sudamericana podría estar con sus siempre compañeros ya para el enfrentamiento ante el Río Duero Soria. Sí, esa formación ante la que los de San Sadurniño se estrenaron como David ante Goliat en la elite nacional, y precisamente cuyas sensaciones, las vividas en esos primeros duelos, quieren recuperar a toda costa. 
  
Con lo puesto
Pero lo primero es lo primero y el “gordo” para los locales es hoy el grupo del UBE L’Illa Grau de Castellón –18.00 horas, Ciudad Deportiva–, equipo que quema esta tarde su último cartucho para acceder a la Copa del Rey. El líbero Marcos Piñón, Pakito, fue en la tarde de ayer el último en llegar a tierras levantinas para reunirse con sus compañeros, trayecto que tuvo que realizar en solitario –hasta Barcelona, a donde el técnico Suárez fue a buscarlo– debido a motivos laborales. 
Con solo ocho jugadores disponibles y tras la marcha de Baranov, será el capitán Uxío García el que realiza las labores del ruso, un “experimento” temporal en una cancha complica y aguardando ya unas más que necesarias vacaciones. “Espero que se vuelva después de Navidad con las pilas cargadas”, señalaba Piñón, “y podamos volver a empezar”. A empezar tal y como lo hicieron ante Soria y Barcelona, más concretamente. Eso sí, el Intasa no va de paseo a Castellón, en donde “queremos rascar algo”, señala, porque lo difícil siempre motiva a los de San Sadurniño.

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