Se olía doblete, a pesar de las lógicas reservas de un Damián Suárez y Lucas Riola al enfrentarse a una prueba del nivel del Campeonato del Mundo júnior de acuatlón, y así fue, en casa, en Pontevedra.
Los chicos de oro del Natación Cedeira Muebles García finalizaron, precisamente, con la ansiada presea dorada en manos de Suárez y con la de plata para su compañero Riola.
No hubo en esta ocasión intuiciones ni rituales previos, sólo la plena confianza en el trabajo realizado durante sus entrenamientos, a cargo de Xan Suárez, para conseguir colocar a la villa en lo más alto del cajón. “La verdad es que llegamos bien, muy bien”, declaraba casi visionario el propio Suárez el día antes de una competición, que definía de la mejor manera posible lo hecho por sus pupilos.
“Es incríble”, sentenciaba. Y es que en la carrera conjunta con los élite y sub 23, Suárez –que cabe recodar disputaba su segundo mundial en una semana, el primero fue de duatlón el pasado sábado– fue además segundo en la tabla general, a sólo cinco segundos del título absoluto, logrado por el húngaro Márton Kropkó, con el que se abrazó al cruzar la línea de meta en Pontevedra. Riola, para agrandar el palmarés de su club, fue “top 10”, ocupando el octavo lugar en estos ya siete días de oro para el triatlón local.