VÍCTOR Manuel y Ana Belén ingresaron en el pseudocuerpo de los funcionarios públicos durante el felipismo. No había ayuntamiento regido por los socialistas que no los contratase para las fiestas. Desde entonces ha habido tiempo suficiente para restaurar tres o cuatro veces la Puerta de Alcalá. Ella se desnuda –metafóricamente, ¡eh!, que, aunque es verdad que en las pelis no le costaba nada ponerse en pelotas, ya va cumpliendo años– en la revista Vanity Fair, donde asegura que “ya no se considera comunista”. Veleidades de juventud. Que acabe en el PP parece un poco fuerte, pero ¿y en Ciudadanos?; ahí como en una ONG recogen a todo el mundo. FOTO: ana belén | aec