si Francisco Umbral levantara la cabeza seguro que estaría muy orgullo del discípulo que le ha salido en Quim Torra. En realidad es probable que el escritor lo repudiara, ya que resulta un individuo cargante y previsible, pero al menos, en eso de hablar de su libro, es digno heredero de Umbral. Y es que con la que está cayendo, Torra sigue con la suya del secesionismo, alentando a las masas y asegurando que es más urgente que nunca. No importa que los contagios estén disparados y que la gestión de la Generalitat sea nefasta, ya encontrará el modo de culpar de eso a España y todo arreglado. FOTO: Quim torra | aec