EL presidente de la Generalitat valenciana, Ximo Puig, no es hijo único; al menos, tiene un hermano, que se llama Francisco Javier y se apellida, lógicamente, Puig. El hermanísimo, es decir, Francisco Javier, pasó ayer por el juzgado para declarar sobre las ayudas para la promoción del valenciano que el director de Política Lingüística concedió a empresas que casualmente administraba. Bien del todo no cheira el asunto. ¿Será cosa del virus de la corrupción que dejó el PP en Valencia?, ¿o que efectivamente la comunidad forma parte de los Países Catalanes e imitan a la metrópoli? ¡Vaya usted a saber! FOTO: ximo puig aplaude, cuando aún tenía ganas de hacerlo | aec