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jueves | 25 abril | 2024
El 3 de marzo de 1996 eran noticia las elecciones generales, en las que podían votar dos millones de gallegos, el funeral de Rouco por la mujer de Fraga, el entierro de un trabajador de Astano y una protesta en Santa Mariña para pedir más seguridad vial.
Las urnas convocan hoy a dos millones de gallegos
Más de dos millones de gallegos, exactamente 2.292.997 personas (el 7,9% del censo español) tendrán hoy la oportunidad de ejercer su derecho al voto y apoyar alguna de las dieciséis formaciones políticas que se presentan a estas elecciones generales de las que saldrán 25 representantes para el Congreso y una docena para el Senado. Los candidatos de los principales partidos políticos de Galicia tienen previsto depositar sus papeletas en las urnas a lo largo de toda la mañana.
Rouco Varela ofició en Madrid un funeral por la mujer de Fraga
El arzobispo de Madrid, monseñor Antonio María Rouco Varela, ofició la misa de réquiem por María del Carmen Estevez Eguiagaray, esposa de Manuel Fraga Iribarne, fallecida el pasado 23 de febrero en Santiago. La misa se celebró en la iglesia de Santa Rita, parroquia a la que perteneció la familia Fraga en los años en los que residió en el distrito de Moncloa.
Multitudinario entierro del trabajador de Astano
Miles de personas acudieron ayer a despedir los restos mortales del trabajador de Astano Manuel Castro Barro, fallecido en accidente laboral. Una representación del astillero de Fene, encabezada por el director de la factoría, Amable Dopico, además del presidente del comité de empresa y miembros de todas las secciones sindicales acompañó a familiares, amigos y, sobre todo, compañeros de trabajo y de ocio del fallecido.
Los vecinos de Santa Mariña exigen más seguridad vial
La movilización convocada por los vecinos de Santa Mariña para exigir información sobre las expropiaciones de la segunda fase del Acceso Norte y para demandar la instalación de semáforos en distintos puntos del barrio no obtuvo el eco que esperaban los organizadores, ya que la asistencia rondó las cuarenta personas, entre ellas representantes del BNG y de Esquerda Unida.
