VA a haber que hablar con Frank de la jungla, que está muy puesto en los asuntos del reino animal, porque algo raro está ocurriendo entre el bicherío. La Policia alemana ha encontrado a dos erizos ebrios después haberse bebido a medias una botella de ponche. Un jabalí domesticado y empadronado en una granja de Polonia se fue de casa y lo encontraron unos días después en el monte borracho como una cuba. Todavía no hay noticias de que el botellón también esté de moda entre la fauna autóctona, pero a ver si un raposo peneque entra en un gallinero y en vez de zamparse los pitos, se pone a dormir la mona.