Acuérdate de Europa

Mientras echa a andar la legislatura con la constitución de las Cortes Generales, entramos en la recta final de las elecciones locales y europeas. Entre tanta vorágine de comicios, cambiar el chip de las generales a estas otras se antoja complicado. No digamos ya a los que, además, eligen nuevos parlamentos autonómicos, tres en un día.
Sabemos de la importancia de las locales, en las que nos jugamos acertar al elegir la actuación política más inmediata a nosotros, de las que debatimos a diario. Sin embargo, no sé si a ustedes les pasará lo que a mí que oigo comentar más bien poco de las europeas, con la importancia que se presume tienen. Es el riesgo de mezclar tantas a la vez, pues cada proceso electoral requiere su afán, necesita sus particulares reflexiones.
Es verdad que se celebró un debate entre los posibles candidatos a presidir la Comisión Europea. Es verdad que cuelga alguna publicidad de las farolas en las calles y es verdad que el cartero nos deja en el buzón algunas papeletas azules de las candidaturas al Parlamento Europeo. Pero no se va más allá. No hay debate europeo en la calle.
Y, claro, después pasa lo que pasa. Si el proyecto de paz y bienestar nos llevó a la creación de una serie de Instituciones de la Unión es paradójico que vayan tener un peso importante los partidos xenófobos y de extrema derecha con nula vocación democrática y aún menos interés por el avance social de los ciudadanos del continente.
Nos tomamos poco en serio los asuntos europeos cuando requieren de la máxima atención, afectan a nuestra vida diaria. Basten unos cuantos ejemplos.
Sin fondos europeos, difícilmente se transformaría Canido en el actual barrio vitalista. Ni gozaríamos del recién estrenado saneamiento de la Ría ya terminado, ni se iniciaría en la desembocadura del río de A Sardiña. Seguiríamos sin autopistas y autovías en esta comarca. 
Hasta el futuro depende de decisiones europeas. A saber, el proyecto EDUSI insuflará suficientes euros a Ferrol y Narón para mejorarlos. Sin aportación europea veo difícil el avance de las comunicaciones ferroviarias en la comarca.
Son algunos ejemplos de cómo las decisiones europeas afectan al día a día local. Hay mucho más en temas de migraciones, comercio, competencia, bienestar, finanzas o empleo.
Por eso, el domingo reflexionemos sobre nuestro voto europeo para que la extrema derecha no campe a sus anchas en las Instituciones continentales para terminar con ellas.
ramonveloso@ramonveloso.com

Acuérdate de Europa

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