::::: MIÉRCOLES ::::::

 Los planes de En Marea ya se frustran antes de la mudanza

LOS planes de En Marea, grupo multicultural hispano-galaico, se empiezan a desmoronar ya antes de llegar al Congreso. Sus miem bros, todos ellos unidos por su alma transgresora, prometieron que serían un grupo gallego, pero olvidaron –¡qué raro!– que por encima de los caprichos está la ley, en este caso el reglamento de la Cámara, que no permite que diputados de un mismo partido formen parte de dos grupos diferentes y tanto Antonio, “El pijo camuflado”, Gómez-Reino como Ángela Rodríguez, son de Podemos, así que tendrán que alinearse  con su grupo madre, con lo que En Marea se queda con cuatro representantes y no puede constituirse en grupo. La consecuencia de esa situación es que la xente do común tendrá que integrarse en el grupo mixto, la sección encargada de exaltar la unidad y la diversidad de España, donde podrán confraternizar con los diputados canarios, los de EH Bildu... 

 La ignorancia del equipo de la abuela Carmena

A la abuela Carmena, a la que, aunque solo sea por su edad, se le suponen unos conocimientos –más sabe el diablo por viejo que por diablo– la han rodeado de unos zotes de marca mayor. Resulta que con sus prisas por purificar Madrid convirtieron a dos Juan Pujol, uno bueno y otro malo, en uno solo, por supuesto, el malo y se quisieron cargar la plaza dedicada al bueno. El bueno fue Garbo, el famoso espía doble decisivo en el desembarco en Normandía, mientras que el malo fue un jefe de Prensa y Propaganda de Franco en 1936... Algo parecido había ocurrido en A Coruña cuando en una reunión para depurar el callejero de elementos franquistas un histórico loitador antifeixista se dedicó a poner cruces: General Sanjurjo... fóra, feixista; General Mola... fóra, feixista; Capitán Troncoso... fóra, feixista. Oye –le apuntó un compañero de corporación–,que era un capitán que luchó con María Pita contra Drake. Era militar –respondió–, así que fóra, feixista...

 El BNG se renueva para que todo siga como siempre

EL Beneguai ha decidido responder a su debacle electoral con un período de reflexión. La medida sería beneficiosa en cualquier otro partido, pero el problema bloqueiro no radica en hacer examen de conciencia, sino en que la UPG lleve las riendas. Mientras los defensores de ideas que solo tienen vigencia en Corea del Norte continúen al frente de la formación no valdrán de nada los períodos de reflexión ni los retiros espirituales.

 Un millón de vacas, mil ríos y mil piscinas

HASTA ahora se sabía que Galicia era la tierra del millón de vacas y de los mil ríos. Sin embargo, gracias al arduo trabajo de los inspectores del Catastro se sabe que también hay mil piscinas más. Se trata de bañeras no declaradas que existen en fincas y parcelas privadas de toda la geografía y por las que sus dueños, por supuesto, no tributaban. Seguro que más de uno, al ver la multa, decide llenarla de tierra y plantar ecucaliptus.

 El gobierno pasa factura rápido

ANDAN los analistas políticos metidos en harina en la siempre complicada tarea de intentar analizar los datos de las elecciones generales para saber qué ocurrirá en las autonómicas y, más allá incluso, en las municipales de dentro de tres años y medio. Y la primera conclusión a la que parecen llegar es que las mareas van perdiendo parte de su fuelle, y mientras emergen en España van cayendo en algunos lugares en los que ya pisan moqueta. Uno de los casos más claros es Compostela, donde Martiño Noriega, el alcalde 2.0, ha visto como su fuerza electoral perdía hasta seis puntos frente al empuje del PP. También en A Coruña sucede algo similar, ya que aunque la Marea, nasía pa’ganá, y los populares suben ambos en votos, la diferencia de los de Negreira respecto a los de Ferreiro crece hasta los mil sufragios. Una distancia que se convertiría en insalvable si los 16.000 coruñeses que apoyaron a los de Rivera optaran por los conservadores de siempre.

 Un gallego permite que Fernando Alonso sueñe con ganar alguna vez otra carrera

FERNANDO Alonso fue campeón del mundo de fórmula 1 y no una vez sino dos y aunque no fue en los tiempos de de Fangio, ni siquiera en los de Fittipaldi, ya cuesta recordarlo, pues desde entonces parece que salga a los circuitos en un coche de pedales. Sin embargo, Gerard López, lucense de Riotorto aunque nacido en Luxemburgo, le ha abierto la puerta a que sueñe con la posibilidad de volver a ganar alguna vez otra carrera, ya que ha vendido la escudería de su propiedad, Lotus, a Renault, la marca con la que el asturiano conquistó sus dos mundiales. Quien sabe lo que puede pasar si vuelve a casa.

 Mas logrará el apoyo de CUP, que se hace la tonta

LOS catalanes para esto de inventarse conceptos y similares son únicos. De allí proviene el federalismo asimétrico y, ahora, el gobierno coral. Es decir, que Artur Mas, con tal de volver a ocupar el cargo de president, está dispuesto a compartirlo. De este modo, podría garantizarse el apoyo de los antisistema de la CUP, que, haciéndose los tontos, dirían que no apoyan a ese corrupto al que aseguraron que jamás respaldarían sino que lo hacen a un cuarteto, casi como el de las Azores. La suerte está echada. Ahora solo falta saber si en toda Cataluña aparecerán cuatro mentecatos lo suficientemente sumisos como para aceptar ser los hombres de paja de Mas. Haciendo bueno aquello de que la pela es la pela...

 Quien exige ahora las “cuentas” es Sestayo

A la secretaria general de los socialistas ferrolanos –y primera teniente de Alcaldía–, Beatriz Sestayo, no le dolieron ayer prendas al exigir de su boss gallego un análisis sobre las causas de la caída de votos. Lo hace pese a que el PSdeG logra mantener al menos el mismo número de escaños que tiene desde 2011. Menos elocuente fue la conocida política –a la que por cierto su propio partido impelió a dejar el Parlamento gallego– a la hora de “analizar” la pérdida de concejales y su “pase” a tercera fuerza local. Sus explicaciones fueron, entonces, parcas, lo que derivó en la dimisión de parte de su ejecutiva ante la falta de autocrítica. Ahora la “exige” ella... Donde las dan, las toman, que diría más de uno...