SI la elección del nuevo entrenador del Deportivo dependiese de la opinión de las redes sociales habría que escoger a Paco y hacerle un contrato poco menos que vitalicio, aunque estando Tino por el medio sería una tontería. El aparato de propaganda del técnico ha convencido a buena parte de la afición de que es el mesías de la fe blanquiazul y, por lo tanto, el único capaz de llevarlo a la gloria... Y donde no ha llegado el servicio de marketing, ha estado él : “Pocos entrenadores dirían no al Deportivo”. Antes lo intentó con Valencia (“Ojalá nos llamen de Mestalla”, admitió su representante), con el Barcelona (“Comparto la filosofía que se respira en Can Barça”), con el Rayo (“Me ofrezco a entrenar al Rayo en Segunda”), con el Espanyol... Así va a ser difícil que no encuentre acomodo antes de que empiece la temporada, pero da la impresión de que será lejos de Riazor, donde parece que la cosa va más de Garitanos.