Los estudiantes británicos, de vacaciones

el Gobierno británico ha cerrado los colegios hasta nuevo aviso y los estudiantes se lo han tomado como un adelanto de las vacaciones y se han ido a celebrarlo por las calles. Se ve que tienen el mismo espíritu que el líder del país, que ha tardado una semana en caer en la cuenta de que lo que está pasando en el resto del mundo también les afecta a ellos. Pero poco, al parecer, porque Boris Johnson y los suyos consideran que los centros escolares deben seguir abiertos para los hijos de sanitarios, profesores, trabajadores sociales, funcionarios judiciales, personal religioso, periodistas, miembros del Gobierno y de los ayuntamientos, empleados de supermercados y de servicios de reparto, policías, bomberos, personal de las fuerzas armadas... Vamos, que las clases van a seguir llenas.