Los ciudadanos tendremos que acostumbrarnos a ver, el próximo año, una buena parte de la ciudad en obras, si nos atenemos a la adjudicación, antes de que concluya el presente ejercicio, de trabajos por valor de seis millones de euros en algunas de las zonas sobre las que, con más ahínco, se ha demandado una actuación. No hablemos ya del lamentable estado en que se encuentra la calle del Sol, la principal vía de acceso desde As Pías y la carretera de Castilla al centro urbano, sino también de la más que demandada construcción del centro cívico de Canido, la eliminación de la caótica imagen de la plaza de Río do Tronco o las reformas en la calle Alegre, que determinarán un único sentido de circulación. Paciencia, en cualquier caso, es lo que se tendrán que aportar los vecinos si a todo ello sumamos los trabajos del colector general. El esfuerzo valdrá la pena.