Una de las últimas campañas medioambientales promovida por el grupo de acción local del sector pesquero de la ría de Arousa permitió retirar un millar de residuos de algunas playas de O Salnés: plásticos, tapones, botellas, envases, guantes y restos de artes de pesca, entre otros. Habría que preguntarse, ¿acaso no sería necesario realizar campañas de sensibilización del propio sector pesquero y marisquero para que sean más conscientes de la necesidad de proteger su medio de vida?
Algunos datos facilitados por organizaciones ecologistas y medioambientales son escalofriantes: un 90% de los residuos recogidos en nuestras costas son restos de plásticos, botellas de plástico y vidrio, así como restos de artes de pesca. Hay que recordar que una botella de plástico puede durar más de 450 años sin degradarse. Tan importante es prevenir las basuras abandonadas por la población y los turistas desde tierra como las generadas en el mar por los propios profesionales.
Está comprobado que el origen mayoritario de los vertidos desde el mar está en las embarcaciones pesqueras y especialmente dañinas son las artes de pesca abandonadas, así como los restos de redes de deriva, palangres etc. Pasado el tiempo está demostrado que el sector pesquero no se ha dado cuenta de que algunos caladeros han dejado de ser rentables por la contaminación y el abandono de cientos de artes de pesca. Luego de nada sirven las lamentaciones; lo mejor siempre es la prevención, la conciencia ecológica y proteccionista de nuestros mares y océanos. Las futuras generaciones nos lo agradecerán.