A estas alturas ya no se sabe qué es más grave, si el hecho de que A Coruña se haya quedado sin quince millones de euros de fondos europeos (imagínense la cantidad de cosas que se puede hacer con ese dinero), o el comportamiento que está mostrando el Gobierno local a cuenta de su estrepitoso fracaso. Mientras la concejala del ramo, Claudia Delso, se resignaba y quitaba dramatismo al asunto afirmando que ya aprenderán para la próxima vez, el alcalde, tras una vertiginosa visita a Madrid, decidió que los fondos estaban garantizados mientras optaba por esparcir la porquería a los partidos de la oposición insinuando que estos habían buscado que la ciudad se quedara sin el dinero. Lo curioso es que, desde el primer momento, toda la oposición, del PP al BNG, pasando por el PSOE, se ofreció a la Marea para ayudarles en la redacción del proyecto, dada la experiencia que tenían de sus años de gobierno. Los mareantes, muy dignos ellos, como siempre, fueron por libre y ahí está el resultado.