FANNY, la extravagante activista de Almas Veganas que jura y perjura que los gallos violan a las gallinas, no se dedica solo a los problemas do poleiro. También se preocupa por los de la pesca y llega a conclusiones tan disparatadas como cuando se refiere a las pitas. Así le ha dado por afirmar que las cañas de pescar son armas para matar del capitalismo. Carlos Arguiñano, que se maneja bien con el peixe en los fogones, le ha contestado que en China, Corea del Norte o Cuba, tres países comunistas, las cañas de pescar no están prohibidas. Argumento rico, rico y con fundamento. FOTO: un galáctico carlos arguiñano | aec