NO es que los accionistas hayan salido a la calle a tirar cohetes, pero la vieja Pescanova ganó en el primer semestre del año 9.000 euros. Seguramente sea menos que el sueldo de alguno de sus directivos, pero sin embargo significa que la compañía abandonó la senda de las pérdidas para entrar en la de los números negros. Habrá que esperar para ver si esta situación se consolida en el tiempo.