En la situación que estamos viviendo, no se puede menos que animar al Concello de Ferrol a cumplir sus planes de duplicar el servicio de comedores para mayores. La previsión es poner en marcha otros dos en los barrios del Ensanche y Caranza, además de los que ya funcionan en San Pablo y Esteiro. Es un servicio dirigido a ancianos que viven solos y que encuentran así la oportunidad de encontrarse con sus vecinos y, de paso, mantener una alimentación adecuada. En una sociedad cada vez más envejecida, hay que apostar por iniciativas como esta, que contribuyen a evitar la soledad y la exclusión.