SANTA E INTERNACIONAL

La consecución de la Declaración de Interés Turístico Internacional para nuestra Semana Santa Ferrolana no es más que la culminación de un proceso de consolidación de una tradición ferrolana que goza de una magnífica salud. Prueba de ello es como año tras año, las cofradías se empeñan en seguir avanzando e introduciendo mejoras. Y el reflejo de ese esfuerzo está ahí, en  nuestras calles, abarrotadas con miles de personas que se acercan a Ferrol a disfrutar de una tradición que los ferrolanos llevamos en la sangre, . Una tradición que nos sigue emocionando, que nos sigue cautivando, porque aúna fervor religioso, arte, historia y cierta dosis de espectáculo visual inigualable.
La Semana Santa de Ferrol es el ejemplo de que aunando voluntades y sumando esfuerzos se consiguen todas las metas. Es el ejemplo de que los ferrolanos, por muy autocríticos que seamos, también sabemos valorar lo nuestro, y ponerlo en valor para el disfrute de todos. Es el ejemplo de que  en Ferrol tenemos una sociedad civil dinámica y entregada, y unas instituciones que cuando se les demanda, responden y apoyan. Prueba evidente es que casi todos los gobiernos municipales se han volcado con la Semana Santa Ferrolana. Y por eso debemos ser agradecidos y felicitar a quienes estos días se entregan en cuerpo y alma para que la Semana Santa sea un éxito. Y esta lo es. Y son muchas las personas que desde el anonimato ponen su granito de arena para ensalzar esta fiesta popular en la que los ferrolanos sacamos a la calle un patrimonio de arte religioso de incalculable valor que las cofradías han ido atesorando durante décadas. Y todos juntos hemos sabido convertir una tradición popular en un atractivo turístico que genera importantes economías para nuestro sector servicios, ampliando la oferta promocional con la Ruta de la Construcción Naval, o un certamen como Equiocio, que atrae a Ferrol a miles de personas.
La consecución de la Declaración de Interés Turístico Internacional para nuestra Semana Santa no debe ser considerado como un objetivo conseguido. Debe ser concebido como un aliciente más para continuar mejorando en todos los sentidos, en el de la promoción turística, y también en el de la conservación de una tradición a la que nadie es ajeno en Ferrol.

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