Dicen por Extremadura que todo lo que no son cuentas, son cuentos. Así que recordemos los hechos concretos:
Hecho nº 1.- El AVE gallego ha sido un permanente engaño durante los últimos 20 años, con fechas garantizadas que nunca se han cumplido y que daban las obras por terminadas en 1993, según declaraba el ministro de la época en 1988. En 2009, la Dirección General de Ferrocarriles situaba el final de una obra, iniciada en 1998, en 2013. Con suerte veremos el AVE por aquí a mediados del 2020. Desde entonces han pasado 30 años en los que los presupuestos se aprobaban, no se ejecutaban, y se volvían a aprobar al año siguiente, vendiéndonos cada año la misma burra, como si fueran burras distintas. Y claro, ni pensar en otras inversiones, porque ya los presupuestos recogían mucho dinero para el AVE. Manda huevos que diría Federico Trillo
Hecho nº 2.- El 8 de mayo del 2018, el ministro De la Serna comprometía con el presidente de la Xunta el estudio informativo de las variantes Peares-Canabal y Monforte-Rubián, imprescindibles para que el AVE llegue a Lugo en tiempo competitivo.
Hecho nº 3.- En noviembre del 2000, el ministerio de Fomento definía el Eje Atlántico Ferrol-Tui, “en doble vía electrificada, ancho normalizado europeo de 1.435 mm y velocidades entre 120 y 220 km/h” y estimaba la inversión en 80.000 millones de pesetas, que equivalen a poco más de 480 millones de euros. “Estas actuaciones en el eje atlántico también comprenden la eliminación del retroceso de Guillarei y de la estación en fondo de saco de Vigo, y la adecuación de vía entre Coruña, Betanzos y Ferrol”. El ministerio añadía: “Otra obra importante es la salida sur de Vigo que permitirá convertir la estación en pasante, enlazar con Porriño y evitar el retroceso hasta Redondela en el encaminamiento de los trenes hacia Tui y Ourense”. El 13 de enero del 2009 el BOE publicaba la salida a información publica del estudio informativo Porriño-Valença do Minho, primer tramite del proceso. El 15 de enero del 2009 la Xunta calificaba de desfasado el plazo de 2015 que Fomento daba para el Vigo-Porto y ratificaba 2013. Maldita hemeroteca
Hecho nº 4.- En un entrevista con el secretario general de Fomento, numero 3 del ministerio, en diciembre, constaté que el Gobierno no tiene calendario para presentar el estudio informativo de las variantes del tramo Lugo-Ourense ni de la salida sur de Vigo. Y eso que son obras cofinanciables por la Comisión Europea.
No estamos pidiendo obras nuevas, sino que cumplan lo que estaba aprobado y comprometido. Porque a Galicia no es que no le den infraestructuras nuevas. Es que le roban las que ya estaban aprobadas. Así que aquello que dicen algunos catalanes de que España les roba, es verdad, pero en Galicia. España no, pero el Gobierno nos paraliza lo que gobiernos anteriores aprobaron. Lo humillante es que a los leales y constitucionales nos niegan infraestructuras básicas, para financiar con ese dinero, el 18 % más de presupuesto a los desleales e insolidarios. Tomamos nota. Ya sabemos lo que hay que hacer si queremos inversiones. Con todo la peor parte la llevan los diputados que tendrán que pedirnos el voto en no mucho tiempo. A ver con que cara nos lo piden. Solo podrán argumentar unos que lo piden para frenar el ascenso del fascismo y otros para frenar el ascenso de izquierdistas y separatistas. ¿Saben lo que les digo? yo votaré al que me pida el voto para seguir viviendo como dios, dándole a una llave y siguiendo las ordenes de sus jefes sin rechistar para que no lo saquen de la lista. Lo votaré por sincero. Al menos.