De un lado estará el Racing, líder del grupo I desde la séptima jornada del campeonato y que, a cinco jornadas para que finalice la liga regular, dispone de cinco puntos de renta sobre sus más inmediatos perseguidores, lo que lo convierte en el máximo favorito para terminar la primera fase de la competición en lo más alto. De otra, el Compostela, una escuadra que ha estado casi desde el arranque del torneo en las posiciones de cola de la tabla clasificatoria y que en la actualidad está en la penúltima plaza, a seis de la que obliga a jugar una promoción para permanecer en la categoría y a nueve de las que condenan al descenso de manera irremediable. Así que el combate que los va enfrentar mañana es un duelo de extremos, en el que el cuadro verde espera no pecar de exceso de confianza para traducir en el marcador la teórica superioridad que indica su situación clasificatoria y en el que el de la capital de Galicia intentará apurar sus opciones de continuar en la categoría otra temporada. Así lo ven dos de los que serán protagonistas en el campo.