La Asociación Sociocultural ASCM ha presentado un proyecto en materia de concienciación, educación y sensibilización vial, que, por una parte, aporta información sobre las necesidades de este colectivo de personas con diversidad funcional y, por otro, denuncia la falta de accesibilidad con que se encuentran.
Las iniciativas fueron presentadas ante la DGT y ayer el presidente de la asociación, Ángel Gárate, se reunió con la jefa provincial y la coordinadora de educación vial de la Dirección General de Tráfico, Victoria Gómez y Rosa Mahía, respectivamente, para dar a conocer la propuesta.
La primera parte del proyecto es un “Decálogo del peatón con discapacidad”, en el que se indican los aspectos a tener en cuenta y las pautas a seguir por los peatones con discapacidad, especialmente los que van en silla de ruedas. También se enumeran las posibles causas de una circulación incorrecta –como  pueden ser el mal estado de las aceras o la inexistencia de rampas o pasos de cebra–, con el fin de concienciar a la sociedad de que esa circulación incorrecta “no es temeridad, sino necesidad”.
El segundo documento presentado fue el cómic “La historia de superpanchita”, en el que se narra la historia de cómo la mascota de la asociación, la vaca Panchita, llegó a convertirse en una superheroína que denuncia la falta de accesibilidad. Se trata, como explica la ASCM, de un relato “ameno y divertido”, indicado para todas las edades y en el que se presentan situaciones reales del día a día de los peatones con discapacidad, de las que la sociedad debe tomar conciencia.
El material creado por la entidad ferrolana se enmarca dentro del programa “Reflejos”, que está subvencionado por la Fundación La Caixa.
"Reflejos” incluye diferentes actividades, todas ellas llevadas a cabo por el equipo de voluntariado inclusivo de la Asociación Sociocultural ASCM, que participa en cada una de las fases de elaboración.